Hasta 500 descargas al día. Es la cifra que está manejando Javier Alonso en las últimas semanas sobre su aplicación para móvil ‘Gasofapp’, una herramienta que permite comprobar en tiempo real los precios de todas las gasolineras españolas. «La semana pasada se duplicaron», afirma este joven informático cacereño.

El nacimiento de ‘Gasofapp’ se remonta al pasado mes de noviembre, cuando aún Putin no había declarado ninguna guerra pero las tarifas del combustible ya estaban escalando sin freno: «Me pareció que sería algo útil, dado los precios de los carburantes y mira cómo estamos ahora», recuerda Alonso. Este informático, que en la actualidad trabaja en la Escuela Politécnica de la Universidad de Extremadura, desarrolló la aplicación porque, asegura, le encanta «programar y enredar» e invirtió «fines de semana y todas las tardes» durante aquel mes de noviembre para que el 5 de diciembre naciera ‘Gasofapp’, disponible gratis en la Play Store de Android y que hoy está entre las diez aplicaciones más populares de automoción. «La lancé solo para Android porque pagas una licencia de 20 euros una vez y ya puedes subir otras aplicaciones que crees. Y todavía no los he recuperado», ríe. «Ahora estoy empezando a trabajar para que también se pueda ver a través de la web y no descarto tampoco hacerlo para Apple. Esto lo hago por afición y para mí es un orgullo tenerla y que la gente se la descargue», afirma.

De hecho, Alonso cuenta cómo su hermano «fue ayer a la gasolinera más barata de Cáceres y el chico le dijo que allí normalmente solo iban camioneros a repostar y que, de repente, en los dos últimos días estaba yendo todo el mundo por una aplicación del móvil», detalla satisfecho.

Cómo funciona

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Al margen del respiro para el bolsillo, otra de las claves del éxito de ‘Gasofapp’ puede ser su sencillez en el manejo, a prueba para cualquier persona aunque no sea nativa digital. Así, una vez descargada, el usuario solo tiene que elegir su ubicación --o activar el GPS para que la herramienta lo localice--, el tipo de combustible que necesita y los litros que tiene su depósito. Una vez marcados estos parámetros, en la pantalla aparece un listado de las gasolineras con sus precios, clasificadas según haya elegido el usuario, por ejemplo con las más baratas primero.

«Los precios se descargan una vez al día, pero si te metes más de una vez solo tienes que actualizar como lo haces en el navegador y salen los de ese momento. En los ajustes definidos puedes habilitar el GPS o quitarlo y modificar todas las opciones», explica. Una herramienta tan simple como útil. Además, «a modo de curiosidad», este informático ha añadido una serie de gráficos para ver la evolución de los precios. La curva, como ya se pueden imaginar, es empinada y Alonso ya medita crear otra app con los precios de la luz. Entretanto, ‘Gasofapp’ supone una ayuda para suavizar toda esta escalada.