De norte a sur de la Raya extremeña con Portugal, desde Valverde del Fresno hasta La Codosera. La vigilancia contra el avispón asiático (Vespa velutina nigrithorax) se incrementa en la región.
Son 136 los avispones capturados en la cuarta y última campaña de revisión de la red de trampas: 35 de ellos en La Codosera, 21 en Valencia de Alcántara, 46 en Cedillo, 19 en Herrera de Alcántara, 4 en Santiago de Alcántara y por último 11 ejemplares en Valverde del Fresno, según datos facilitados por la Junta de Extremadura a este periódico. Dentro del programa vigente de vigilancia activa, la Dirección General de Sostenibilidad tiene una red de 79 trampas distribuidas en el área fronteriza en las localidades de La Codosera, Valencia de Alcántara, Cedillo, Herrera de Alcántara, Santiago de Alcántara, Alcántara, Zarza la Mayor, Cilleros y Valverde del Fresno para la detección del avispón asiático.
Apicultura
«Una sola colonia de este avispón puede dar lugar a entre 2.000 y 3.000 nuevas reinas, con otros tantos nidos, con lo cual puede ser una explosión», explica Ventura Gil, presidente de la Asociación de Apicultores Profesionales de Extremadura (APAEX).
El avispón se alimenta de otros insectos, por lo que una colmena de abejas es todo un banquete para esta especie. Así, ataca a las colmenas para nutrir a sus larvas con las abejas, por lo que sus efectos pueden ser letales y acabar con colonias en pocos días, tal y como explica Gil, quien sin embargo también subraya que la situación aún no es grave, dado que «su presencia de momento está muy limitada a La Raya» pero «como ocurre con otras especies invasoras, tememos que se pueda desarrollar rápidamente en otras zonas». «Por el desarrollo que ha tenido en otras regiones de España, en zonas arbóreas altas, no debería extenderse en la dehesa, pero también es cierto que estas especies invasoras tienden a adaptarse rápidamente a cualquier espacio», apunta Gil.
El avispón asiático llegó a Europa en 2004. Lo hizo desde el sudeste asiático para recalar en Francia. Desde allí comenzó a expandirse, invadiendo en pocos años amplias zonas del norte de Italia, España y Portugal.
Ya en 2010, Navarra empezó a combatir esta plaga mientras este invasor continuaba su expansión a lo largo de toda la Cornisa Cantábrica y Cataluña.
Por sus características ecológicas se pensaba que tardaría un tiempo en llegar hasta el sur de la Península, pero sin embargo solo hicieron falta 6 años para que recalara en el territorio extremeño. Proveniente de Portugal, esta especie se detectó por primera vez en Extremadura en el término municipal de Cedillo en 2016 y durante los siguientes años el número de ejemplares detectados fue en aumento poco a poco hasta superar en 2019 los 50 ejemplares en distintos pueblos extremeños de La Raya. Ese mismo año se detectó por primera vez un nido de avispón asiático en el río Sever, en Cedillo, al que le siguió un segundo nido en poco tiempo. El avance no es muy veloz pero tampoco se detiene: en apenas tres años las capturas de este insecto se han casi triplicado, de 50 a 136.
Colaboración
«Los apicultores, como cualquier ciudadano, colaboramos llamando al 112 si avistamos un nido, para así intentar si no parar al menos frenar la propagación del avispón», expone Gil. En efecto, la Junta recuerda que «la dificultad de localizar los nidos, como la inmensa superficie de territorio donde buscar, hace indispensable la colaboración ciudadana y de los profesionales de la apicultura para dar con estos nidos y poder proceder a su eliminación de forma inmediata». Desde la consejería de Transición Ecológica se subraya que la eliminación de los nidos es la forma «más efectiva» de combatir esta invasión «en sus primeros estadios».
Detectar sus nidos para eliminar cualquier posibilidad de expansión es el único arma posible por el momento para tratar de frenar al avispón asiático antes de que sea demasiado tarde. La última amenaza para las abejas, polinizadoras y básicas para mantener el equilibrio natural, acecha Extremadura.
Cómo distinguir a este avispón
El avispón asiático tiene el tórax y abdomen negros, salvo el cuarto segmento, amarillo. Las patas son marrones y amarillas en la parte baja. Sus alas tienen color oscuro
Desde la Junta se pide precaución para evitar su picadura. Recuerda que «no es más peligroso que otras especies autóctonas» y que su apodo de ‘avispa asesina’ «no debe tomarse de forma literal»
Especies invasoras: causas y efectos
QUÉ SON
Se denominan «especies invasoras» a aquellas que han sido introducidas --de forma natural, accidental o intencionada-- en un medio que no es el suyo y que, pasado cierto tiempo, consiguen adaptarse a él y colonizarlo
GLOBALIZACIÓN
Son varias las vías por las que diferentes especies empiezan a vivir en medios que no son los suyos, ya sea por fenómenos naturales, como el cambio climático, como por intervención directa humana:comercio, turismo o transporte, legal o ilegal
AMENAZAS
De acuerdo al Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), las especies invasoras son la segunda causa de pérdida de biodiversidad en el mundo. Desde la Junta se advierte que «son los invasores de menor tamaño los que resultan más difíciles de detectar»
