La Asociación de Distribuidores de Gasóleo de Extremadura (Asdigaex) acaba de constituirse. Está formada por diferentes empresas del sector afectadas negativamente por la situación actual del mercado y que denuncian estar "en claro desamparo frente a la Administración". 

Según señalan en nota de prensa la forzada implantación del descuento de 20 céntimos por litro de gasóleo provoca situaciones límites para los distribuidores: 

  1. Se ven obligados a vender por debajo de su precio de coste, confiando en que la Administración les reintegre los descuentos realizados.
  2. Se le generan serios problemas financieros que pueden provocar el cierre de algunas empresas ante la falta de liquidez que la medida provoca.
  3. El incremento del precio de los combustibles, lejos de suponer una ventaja en sus márgenes, conlleva la disminución de los mismos ya que sus costes también se han disparado conteniéndolos en la medida de lo posible para no trasladarlos a sus clientes. 

Aseguran que los "Distribuidores de Gasóleo no pueden ser considerados como generadores del problema existente y convertirse en objetivo de las protestas, sino como una víctima más de la situación que vivimos. Desde esa perspectiva, manifiestan su apoyo al resto de sectores afectados en nuestra región (agricultura, industria, ganadería, transporte y residencial) y se ofrecen a apoyar cualquier iniciativa tendente a buscar soluciones en positivo". 

Añaden que "la carga impositiva actual sobre el gasóleo alcanza casi un 47% del precio final, lo que dota a la Administración de un amplio margen para acordar una rebaja de impuestos, como medida más eficaz para paliar la situación existente".