Los responsables de los grandes proyectos industriales previstos en Extremadura coincidieron ayer en Cáceres en la importancia de contar con ayudas públicas económicas a la inversión para la puesta en marcha de los mismos, además de destacar la apuesta que se hace respecto a las energías renovables, entre otras razones para elegir la región como destino. Convocados por el Grupo Ros y la Fundación Caja Extremadura, el Centro de Cirugía de Mínima Invasión Jesús Usón acogió la segunda edición de la mesa debate Proyectos que revolucionan Extremadura, en la que participó el presidente de la Junta, Guillermo Fernández Vara.
Uno de los asistentes fue José Domínguez, presidente de Envision AESC España, filial del grupo Envision, promotora de la fábrica en Navalmoral, quien anunció que en dos semanas presentarán la solicitud a los Incentivos Regionales, que esperan lleguen a los 115 millones de euros, «todo lo que podamos», una condición para comenzar a construir la gigafactoría.
«No comenzaremos la construcción hasta no tener claro la presentación de los Incentivos Regionales»
«Actualmente hay un desarrollo importante de fábricas de baterías en Europa, todos competimos y para nosotros la financiación es fundamental, los Incentivos Regionales son fundamentales en el proceso. No comenzaremos la construcción hasta no tener claro la presentación de los mismos, que haya una posibilidad real de obtenerlos», dijo Domínguez.
Así, en su opinión, «si no llegan los 115 millones, tendremos muy difícil competir con los demás, porque a los demás sí les han llegado cosas, por tanto es fundamental. Extremadura tiene muchas ventajas y una es la financiación con los Incentivos Regionales, cuenta mucho en la balanza»
Del mismo modo, recordó que optarán a la segunda convocatoria del PERTE, una «financiación blanda, con intereses buenos» de la que se quedó fuera en la primera convocatoria al estar ya iniciado el proceso cuando surgió el proyecto de Navalmoral.
