El Ayuntamiento de Mérida y los libreros buscan ubicación para la Feria del Libro

La llegada de la primavera viene acompañada de numerosas actividades culturales. Una de las más importantes es la Feria del Libro que, aunque aún faltan casi dos meses para su celebración, y aún no tiene una programación cerrada --ni siquiera con un presupuesto definitivo, a falta de que se aprueben las cuentas del ayuntamiento para el 2010-- se enfrenta a una edición que será algo especial.

El reciente inicio de las obras de remodelación del parque López de Ayala, sede habitual de la cita durante los últimos años, ha cogido de sorpresa a los libreros, que ven peligrar el buen funcionamiento de la feria en el caso de que el lugar escogido no sea el más apropiado. El delegado de Cultura, Julio César Fuster, ya ha mantenido una reunión con ellos para tratar de consensuar la ubicación más apropiada tanto para los propios comerciantes como para los ciudadanos.

La búsqueda se enfrenta al menos a tres requisitos. Por un lado, debe ser un lugar céntrico y de fácil acceso para el gran público; por otro, necesita cumplir con unas determinadas dimensiones para poder instalar no solo las casetas de las librerías y las instituciones, sino también las grandes carpas para las presentaciones de nuevos títulos, las firmas de libros, la asistencia de autores, así como las actuaciones musicales, que en los últimos años han tomado cada vez más peso en la programación.

El tercer y último condicionante es quizás el que más preocupa a todas las partes, y es conseguir una localización que consiga reunir las anteriores características y que, además, consiga mantener una temperatura ambiente agradable, como así ocurre bajo el abrigo de los árboles del parque López de Ayala. La Feria del Libro de Mérida se celebra a principios del mes de junio, una fecha en la que pueden darse temperaturas lo suficientemente altas como para retraer a los más aficionados a la lectura de desplazarse hasta la feria.

Hasta el momento han sonado algunas posibles ubicaciones, y no todas convencen a los libreros. Uno de los lugares planteados sería la Plaza de Margarita Xirgu, que es la que da acceso al Teatro y el Anfiteatro Romanos. En este caso cumpliría con la ubicación céntrica y con el espacio suficiente, pero el calor podría ser un problema. También se planteó incluso el traslado al Parque de Las Siete Sillas, pero la idea de desplazarse de la zona centro no ha conseguido muchos adeptos.

PROPUESTA DE LOS LIBREROS De hecho algunas de las propuestas planteadas a EL PERIODICO por libreros consultados optarían por acercarse aún más al centro de la ciudad, de tal manera que podría plantearse la Feria del Libro como lo hacen los mercadillos medievales, utilizando las calles del entorno de Santa María y el Arco Trajano, donde la sombra de los edificios ayudaría a mitigar el calor.

Precisamente ayer el presidente del Grupo Municipal Popular, Fernando Molina, preguntó "sin ánimo de generar nuevas polémicas" sobre cómo afectará la remodelación del Parque López de Ayala a la próxima edición de la Feria del Libro. Si coincidirán en el tiempo, cambiará la ubicación o se ha informado a los libreros fueron algunas de las cuestiones que planteó y a las que el ayuntamiento respondió, a través de un comunicado del concejal de Cultura, que el consistorio está trabajando en la nueva ubicación del certamen y que se informó de ello a los libreros el pasado 2 de marzo.