El Ayuntamiento de Mérida ha respondido en tiempo y forma a la demanda interpuesta por Correos, que le reclama una deuda que supera los 200.000 euros. El portavoz del equipo de Gobierno, Fernando Molina, reiteró ayer que el municipio tiene voluntad de hacer frente a estas obligaciones de pago, contraídas entre 2009 y 2010, pero acudirá a la vía judicial para evitar el pago de los intereses de demora que también reclama la empresa postal. El ayuntamiento ha rechazado la propuesta presentada por Correos para saldar la deuda, y que consiste en pagos fraccionados trimestralmente que ascienden a 39.000 euros. Se trata de unas cantidades a las que el municipio, dada la situación de sus arcas, "no se puede comprometer", según Molina, por lo que se tratará de buscar fórmulas más ventajosas para el ayuntamiento.