Todo divide a los Estados y todo une a los municipios». Fue la frase que pronunció Edouard Herriot, alcalde de Lyon, el 28 de enero de 1951, en lo que podría considerarse el inicio del movimiento de ciudades hermanas. Los primeros lazos nacieron inmediatamente después de la Segunda Guerra Mundial, bajo el impulso de algunos alcaldes convencidos de que la amistad entre los ciudadanos europeos era la primera etapa hacia la construcción de un continente estable y pacífico que quería dejar atrás la barbarie. Concretamente, desde 1951, los hermanamientos son la razón de ser y el núcleo de actividades del Consejo de las Municipalidades y Regiones de Europa.

La primera ola, con 120 hermanamientos firmados en los años cincuenta, tuvo lugar entre Francia y Alemania, grandes enemigos en la contienda mundial. A partir de ese momento se extendieron por Europa y en 1991 había más de 8.500 hermanamientos entre catorce países. En 2006 se superaron los 17.000 entre al menos dos poblaciones europeas. Paulatinamente se han abierto a otros continentes y el número de lazos se multiplica entre poblaciones a cientos y miles kilómetros.

Cáceres ha sido un buen ejemplo de esta red de cooperación, que en su caso ha extendido a España y Europa mediante protocolos con Santiago de Compostela (1974); dos ciudades francesas como La Roche-sur-Yon (1982) y Blois (2006); dos portuguesas (Castelo Branco en 1997 y Portalegre en 2005); y dos italianas (Piano di Sorrento y Norma, en 2008). Pero desde 2009 ha dado el salto más allá de Europa mediante los hermanamientos con la palestina Gaza (2009); la israelita Netanya (2010); Santo Domingo, capital de República Dominicana (2010); Quillota, en Chile (2011); y el más reciente, Lumbini, en Nepal (2020).

SEIS EN CUATRO AÑOS

Los primeros lazos respondieron al ánimo de acercamiento que se contagió por toda Europa, pero entre 2008 y 2011, durante el mandato de la alcaldesa Carmen Heras, se impulsaron hasta seis hermanamientos consecutivos con Europa, Asia y Sudamérica, que obedecían al afán por divulgar la candidatura de Cáceres como Capital Europea de la Cultura en 2016. Han tenido que pasar nueve años para el establecimiento de nuevo lazos con la ciudad nepalí de Lumbini. El Ayuntamiento de Cáceres acaba de iniciar el expediente de hermanamiento con este municipio asiático.

La mayoría de los acuerdos suscritos por Cáceres responden a una inquietud de cooperación en distintos ámbitos (social, cultural, turístico...), aunque es cierto que los convenios con las dos ciudades portuguesas, Castelo Branco y Portalegre, sí responden a un objetivo más funcional, con proyectos de desarrollo, concretos y numerosos, a través de Triurbir, agrupación de interés económico a la que además pertenece Plasencia. También el caso de Lumbini, ciudad donde nació Buda, encaja en la fórmula de los hermanamientos más eficaces y prácticos, puesto que buscan una iniciativa común y consensuada, en este caso la materialización del ‘Proyecto Gran Buda’, el mayor centro budista previsto en el planeta.

El edil de Turismo, Innovación, Transparencia y Desarrollo Tecnológico, Jorge Navarro, acaba de regresar del viaje organizado a Lumbini para sentar las bases de este acuerdo. «Los hermanamientos constituyen una oportunidad de crear lazos con otras ciudades, y lo importante es que desemboquen en una colaboración y en proyectos reales», afirma, convencido de la oportunidad que supondría el recinto budista.

«En Cáceres tenemos una larga trayectoria de hermanamientos. Es cierto que con algunas ciudades se ha trabajado más que con otras», señala. Él lo ha experimentado en primera persona, de hecho su vida ha estado muy influida por uno de estos acuerdos. «Fui uno de esos estudiantes que viajaron de intercambio a La Roche-sur-Yon durante dos años seguidos y este acercamiento a la cultura francesa marcó mi trayectoria, ya que hizo que acabara estudiando Comercio Europeo en la Reims Management School y viviendo en Francia», explica, convencido de la importancia de estos lazos «como oportunidades magníficas para construir una cooperación beneficiosa».

CONTENIDO REAL Y PRÁCTICO

De hecho, desde el ayuntamiento pretenden «que los hermanamientos de Cáceres tengan sobre todo contenido, porque de nada valen si realmente no se aprovechan, y ese contenido puede ser muy útil en el ámbito educativo, de juventud, deportes e incluso económico». Ahí están los objetivos con Lumbini y los acuerdos con Portalegre y Castelo Branco, «que evidencian el desarrollo que puede conseguirse desde un hermanamiento más intenso», o también el caso de Blois, «una ciudad francesa que ha trabajo bien las políticas de juventud para reducir las brechas sociales». «Son ejemplos interesantísimos en los que queremos profundizar», reflexiona el edil.

En estos momentos, la política de hermanamientos se centra en Nepal: «Lumbini nos puede parecer lejano pero tenemos muchas semejanzas (ambas Patrimonio de la Humanidad, ambas ciudades con una clara espiritualidad...), y sobre todo se trata de una bisagra entre los dos países emergentes, China e India, que van a marcar el desarrollo económico del siglo XXI. Nepal es una gran plataforma para entrar en estos mercados al estar en pleno eje de crecimiento mundial», concluye el edil.

Santiago de Compostela

España (1974)

Fue el primer hermanamiento que firmó Cáceres allá por 1974. El primero y el último con otro municipio español. Sin duda, dos ciudades unidas por el mismo perfil: arte milenario, historia en piedra y unos recursos muy apoyados en el turismo. Ambas pertenecen al Grupo de Ciudades Patrimonio de la Humanidad.

La Roche-sur-Yon

Francia (1982)

La unión con esta ciudad del oeste francés (53.000 habitantes) es la que ha generado más actividades entre administraciones, centros educativos, empresarios, deportistas... Un grupo de profesores galos descubrió Cáceres en 1976 y ahí se iniciaron los contactos, que se relanzaron con el apoyo de los franceses a Cáceres 2016.

Castelo Branco

Portugal (1997)

Además de los hermanamientos individuales, Cáceres forma parte desde 1997 de la asociación Triurbir, que le supone una vinculación muy especial con Castelo Branco (34.000 habitantes). Ambas comparten los problemas y potencialidades del Oeste ibérico rayano, y les unen crecientes relaciones comerciales y culturales.

Portalegre

Portugal (2005)

Aunque esta localidad lusa de 25.000 habitantes ya se encontraba unida a Cáceres mediante Triurbir, en julio de 2005 se hermanaron para promover el progreso, el desarrollo y el bienestar de las dos ciudades, y reforzar la identidad local de cada una de ellas mediante actividades en los ámbitos de la cultura, el turismo y la economía.

Blois

Francia (2006)

Bella localidad francesa situada en las orillas del río Loira, entre las ciudades de Orleans y Tours, con una población de 47.854 habitantes. Al igual que Cáceres, está declarada Patrimonio de la Humanidad y ambas se hermanaron en 2006 con el fin de impulsar el intercambio industrial, las relaciones educativas y el turismo.

Piano di Sorrento

Italia (2008)

En julio de 2008 se oficializó un nuevo hermanamiento con Piano di Sorrento en el consistorio cacereño. La agricultura, los espacios verdes y el turismo natural fueron los puntos que motivaron el interés por Cáceres de esta bella localidad costera de 13.136 habitantes, cuna de Villa Massa, empresa que participó en los actos.

Norma

Italia (2008)

Los mandatarios de Cáceres y Norma firmaron el protocolo de hermanamiento el 19 de abril del año 2008 en el salón de plenos cacereño, al que acudió una amplia delegación italiana del ámbito social, cultural y económico. La primera edil, Carmen Heras, recordó que de este municipio procedía el fundador de Norba Caesarina en el siglo I a. de C., el cónsul Cayo Norbano Flaco. Ambas ciudades se comprometieron a establecer mecanismos de cooperación económica y cultural.

Gaza

Palestina (2009)

El Ayuntamiento de Cáceres aprobó por unanimidad en el pleno del 16 de abril de 2009 el hermanamiento con la ciudad de Gaza, una iniciativa enmarcada dentro del Programa de Relaciones Internacionales con el que Cáceres pretendía establecer lazos de amistad y cooperación con otras ciudades y pueblos. La idea partió de distintas plataformas comprometidas con Palestina, que avivaron los contactos, pero esta vinculación no ha tenido mayor continuidad.

Netanya

Israel (2010)

El 21 de septiembre de 2010 se firmó el hermanamiento entre Netanya y Cáceres para iniciar una cooperación en materia cultural, económica y turística, acto al que acudió el embajador de Israel, Rafael Schutz. «Esta relación va a ser algo muy especial, no sólo por la belleza de Cáceres, sino por la belleza de la gente», dijo la alcaldesa de esta ciudad israelita de 205.000 habitantes, con una playa mediterránea de 14 km.

Santo Domingo

República Dominicana (2010)

El 14 septiembre de 2010, Santo Domingo se convirtió en la primera ciudad americana en hermanarse con Cáceres. Suscribieron un protocolo para potenciar las relaciones comerciales y empresariales. De hecho, 19 firmas de un grupo inmobiliario cacereño lograron un acuerdo para construir 10.000 viviendas en la capital dominicana.

Quillota

Chile (2011)

El 7 de abril de 2011, Cáceres y Quillota (Vaparaíso, Chile) firmaron un acuerdo sobre relaciones de amistad y cooperación, con ejes en el fomento de la cultura, la economía, el turismo y las nuevas tecnologías. Acudió el embajador de Chile acompañado por diferentes representantes del sector turístico y alimentario.

Lumbini

Nepal (2020)

Hace apenas tres semanas, una delegación cacereña respaldada por la Junta ha realizado un viaje a Lumbini para sentar las bases de este hermanamiento. Los nepalíes quiere crear en Cáceres el ‘Proyecto Gran Buda’, el mayor centro budista del mundo, y Cáceres busca un aliado en la zona del planeta donde se prevé el mayor crecimiento.

La red tejida por Cáceres durante 26 años, con más o menos contenidos, llega a Europa, Asia y Suramérica