El punto limpio de la charca Musia era ayer de todo menos limpio. Enseres, restos de embalajes, piezas de coches y otros residuos se amontonaban esparcidos por el suelo alrededor de los tres grandes contenedores que configuran este punto de recogida de basuras, establecido junto al perímetro de la charca. La situación, que viene siendo habitual en las últimas semanas, obligó ayer al ayuntamiento a adoptar medidas urgentes contra el vertido incontrolado de la basura.

Los concejales de Mantenimiento, Joaquín Rumbo, y de Seguridad, Santos Parra, visitaron la zona junto a técnicos de Conyser y acordaron su limpieza urgente, que se llevó a cabo por la tarde, y establecer un dispositivo de vigilancia para evitar que se repita la situación. "Pedimos la colaboración de los empresarios y de los ciudadanos que usen este punto limpio para que depositen residuos urbanos y no industriales y que lo hagan en los contenedores", explicó Rumbo.

Apuntó que la solución definitiva pasa por establecer el sistema que funciona en Capellanías, con un operario que controla el vertido, "pero es costoso".