Para uno de los responsables de la Asociación de Músicos de Extremadura, los festivales están cubriendo la falta de conciertos en salas privadas y dando trabajo a bandas de la región. Pone como ejemplos Cáceres Pop-Art y Grande Rock, con grupos de la escena indie y de rock que antes venían a bares."El público responde y lo importante es que haya variedad para atender los gustos de la gente, además de servir de plataforma a los grupos extremeños", afirma Búrdalo, para el que la viabilidad está asegurada aunque, dice, "no se puede pretender que haya 20.000 personas en cada uno".