Viajar te abre la mente. Lo saben Ramiro Cristófaro y Clara Rodríguez Alcobendas, ambos de 27 años y del Boca Juniors, que quieren convertirse en los primeros argentinos de Buenos Aires en recorrer todos los países del mundo. Ahora están en Cáceres, el punto de destino para ellos desconocido porque, según confiesan, «no teníamos ni idea de dónde estaba Extremadura».

Cristófaro empezó a los 12 años recorriendo Europa con su familia. «Dudaban en si llevarme o no porque era muy chiquito, pero creo que ahí me picó ese bichito de viajar», recuerda. Después logró convenios para trabajar fuera; estuvo en Estados Unidos, en un hotel, cuidando la piscina, llevando las bandejas... Además ha pasado por el suroeste asiático, un año trabajando en el desierto de Australia y recorrió las islas del Pacífico. Así hasta 111 países de los 194 del planeta.

Junto a sus padres también visitó la India, las Maldivas, hicieron un crucero por el viejo continente, América, pasando por África. Hace año y medio conoció a Clara. Comenzó entonces esta bonita historia de amor con la maleta como protagonista. «Cuando empezamos a salir, él acababa de volver de América. Me propuso que nos fuéramos juntos. ‘No, no me voy a ir porque es tu sueño’, le contesté. Pero una cosa llevó a la otra. Salió una beca para venirme a estudiar a Cáceres una maestría en Investigación en Ciencias Sociales en la Universidad de Extremadura. ¿Nos vamos a Europa? Pues vamos a Cáceres», relata Clara. Y aquí están, «en la sorpresiva Cáceres» como ellos definen la ciudad. «Nos parece realmente hermosa, nos da muy buena onda».

A lo largo de este tiempo han vivido la dura experiencia de hacer un voluntariado en Haití. En las islas del Pacífico han conocido Vanuatu, con el volcán activo más accesible del mundo. «Ir por la cima del crater mientras erosiona es una locura. La lava te pasa a vos en altura». ¿Qué miedo, no? A la pregunta responde Cristófaro: «Tremendo porque oyes el rugido, cómo tiembla la tierra».

Sus ojos han visto Roma, el Algarve de Portugal, las auroras boreales en Islandia, los iglús de vidrio en el norte de Finlandia, Cabo Verde, Chipre. Todo lo reflejan en su blog ‘Rama por el Mundo’ (ramacristofaro, en instagram), donde dan consejos, escriben notas y bitácoras.

Con presupuesto limitado «y poca plata», compaginando estudios y trabajo, buscan los destinos más asequibles. El próximo reto: Ucrania, Moldavia, y quién sabe si Irán. En dos o tres años quieren concluir el plan más ambicioso de su vida, guiado por los mapas, la mochila, los seguros, las vacunas y, sobre todo, el amor.

En Chipre. Ayia Napa.

Islandia. Auroras boreales en Reikiavik.

Argentina. Bariloche

Marruecos. Fez