La Asociación de Padres para la Integración de Cáceres (Aspainca) quiere crear una residencia y pisos tutelados para personas con discapacidad. Es el siguiente reto que se marca el colectivo, que ayer inauguró oficialmente su nueva sede en la calle San Petersburgo (Nuevo Cáceres), en el edificio del antiguo Ateneo. Es un objetivo a largo plazo y para el que necesitan la cesión de terrenos, que solicitarán al ayuntamiento y a la Junta de Extremadura.
«Es lo que nos falta, nuestros chicos se van haciendo mayores y, cuando sus padres faltan, se encuentran con el problema de que nadie puede encargarse de ellos, una residencia o unos pisos tutelados sería una solución a este problema», indica la presidenta de Aspainca, Amparo Gómez.
La asociación está pendiente además de poner en marcha un centro de día en el que se ofrecerán terapias a las personas más afectadas. Por el momento el centro ya cuenta con la acreditación para realizar esta actividad pero falta aún recibir el visto bueno de la Junta de Extremadura.
Este último ha sido uno de los servicios que ha podido poner en marcha Aspainca desde que se instalara en la nueva sede de Nuevo Cáceres. En este espacio de más de 800 metros cuadrados tienen la oportunidad de desarrollar más actividades para las personas a las que atiende, en total más de 200 con edades comprendidas entre los 0 y los 66 años.
El colectivo ofrece varios servicios: Atención temprana (para afectados de entre 0 y 6 años), habilitación funcional (hasta los 21 años) y centro ocupacional (desde los 21 años en adelante). «El nuevo centro nos permite unificar todos nuestros servicios, ya que antes cada uno se realizaba en un espacio distinto», señala Amparo Gómez.
CENTRO OCUPACIONAL / Aspainca continúa manteniendo además su local de la calle Betania, en el que se encuentra el centro de empleo y en el que lleva a cabo también el taller de jardinería (hasta allí trasladan en un autobús a los usuarios que van a asistir a esta actividad cuando se celebra).
Aspainca, que comenzó a desarrollar su actividad en la capital cacereña hace ya tres décadas, llevaba años demandando un nuevo centro, ya que el anterior no estaba adaptado y se quedaba pequeño para la cantidad de personas a las que atienden. El ayuntamiento se lo cedió después de que el Ateneo anunciara que se marchaba de este edificio.
El colectivo se trasladó el pasado mes de enero, después de llevar a cabo una reforma del inmueble. Ayer se celebró la inauguración oficial del mismo a la que asistió la alcaldesa de Cáceres, Elena Nevado, y el consejero de Sanidad y Políticas Sociales, José María Vergeles, los concejales socialistas María Ángeles Costa y Paco Centeno y el presidente y la portavoz del PP, José Antonio Monago y Cristina Teniente.
