La comisión informativa de Patrimonio del ayuntamiento dictaminó ayer a favor de la cesión de una parcela en el polígono Nuevo Cáceres a los Hermanos de la Cruz Blanca. La congregación de franciscanos regenta desde hace más de dos décadas una casa en la calle Manga en la que se atiende a una treintena de discapacitados. La petición de terreno al ayuntamiento se presentó hace un año para construir un nuevo centro social más adecuado al servicio que prestan.

La parcela cuenta con una superficie de 2.640 metros cuadrados y linda con los terrenos que ocupan otros centros destinados a fines sociales, como los de Cocemfe y Novaforma. Los hermanos de la Cruz Blanca han tenido que acreditar que son una entidad sin ánimo de lucro de utilidad pública o comunidad religiosa legalmente reconocida para una adjudicación directa de este terreno, dado que en caso contrario la concesión del uso del suelo tendría que seguir un proceso de licitación pública con concurso. Según informó ayer el ayuntamiento, el acuerdo de la comisión es de cesión y no se citó que haya concurso.

La casa que ocupan en la calle Manga fue cedida por la diócesis de Coria-Cáceres. Según informó ayer el gobierno local, la parcela de Nuevo Cáceres, "que cuenta con una calificación urbanística de equipamiento genérico, se destinaría a un centro adecuado a las necesidades de los usuarios de la casa". El pasado enero se solicitó desde la congregación la colaboración de los ciudadanos para lograr 80.000 euros que se necesitaban para adaptar el edificio que ahora ocupan en la parte antigua a la normativa sobre la atención a discapacitados.

No fue la única cesión de suelo propiedad del ayuntamiento sobre la que ayer se pronunció la comisión informativa de Patrimonio, que también dictaminó a favor de la cesión de 600 metros cuadrados a la Consejería de Educación para construir "un nuevo patio" y dotar de "un nuevo acceso" al instituto Agora, según detalló el gobierno local.

ANGEL ARIAS La comisión también acordó la aceptación de la donación de la obra pictórica de Angel Arias Crespo. El dictamen de ayer viene precedido de un acuerdo del pleno de la corporación local. Son veintiséis cuadros que el pintor dona gratuitamente y que pasarán a formar parte del patrimonio local. La concejalía de Cultura destacó la "aportación técnica y artística" que supone la obra de Angel Arias.

Otro asunto abordado ayer por el órgano informativo del ayuntamiento fue el acuerdo para dar de alta en el inventario del ayuntamiento ocho locales en el residencial Universidad que se destinan a uso comercial, a excepción de uno de ellos que se reserva para sede de la asociación de vecinos. El tamaño de estos locales, que se tendrán que sacar a licitación, está entre los 109 y los 350 metros cuadrados. La necesidades de servicios, como comercios, es una demanda de los residentes de esta zona de la ciudad, cuyo desarrollo se vio afectado durante años por la sentencia judicial que dejó el residencial fuera de ordenación. El nuevo plan de urbanismo transformó el polígono en suelo urbano para permitir ordenarlo.

QUIOSCO AVELINA Por último, en la comisión de ayer no llegó a tomarse ningún acuerdo sobre el futuro del quiosco Avelina, salvo que su titular abone las tasas impagadas desde hace cuatro años por la utilización privativa del dominio público, atrasos que suman unos 40.000 euros. La comisión acordó solicitar más informes antes de tomar un acuerdo. Sobre el quiosco pesa una sentencia del TSJ del 2006 que anuló las licencias que se dieron en 2002 y 2003 para la ocupación del suelo donde está el quiosco, en el paseo de Calvo Sotelo, y de obras. La sentencia del TSJ, que no se llegó a ejecutar, se produjo tras un recurso presentado por la Junta, ya que no se había convocado concurso para adjudicar el uso del suelo y el edificio del quiosco no se ajusta al plan general de urbanismo.