La sección de obras del ayuntamiento ha iniciado esta semana los primeros trabajos reclamados por La Cañada para dotar a la barriada de dos áreas de juego infantil. Paralelamente, Asuntos Sociales estudia la viabilidad de la guardería de la zona, cerrada desde su construcción, y se evalúa la posibilidad de instalar un acerado paralelo al vial desde el ferial. De esta forma el ayuntamiento trata de afrontar las reivindicaciones de mayor envergadura de la barriada, mientras lleva a cabo otras actuaciones ´menores´.

Los trabajos del área infantil se iniciaron el pasado jueves, tras meses de espera, y está previsto que se prolonguen por un mes. "La empresa que suministraba los juegos no contaba con el modelo concreto que sa iba a instalar allí", explicó a EL PERIODICO el concejal de Infraestructuras, Miguel López, tras reunirse con los representantes vecinales de La Cañada el viernes de la semana pasada. Entonces acordaron también instalar bandas reductoras de velocidad en dos de las vías principales, aunque para esto último no hay aún fecha prevista.

La guardería, que nunca se llegó a abrir, es una de las reivindicaciones más antiguas de la barriada. Sobre esta dotación, el edil señala que hubo "problemas burocráticos que impidieron que al ayuntamiento recepcionara el inmueble", algo que acaba de suceder. Tras pasar a manos municipales, el problema es que "las instalaciones están muy deterioradas por el abandono", señaló Miguel López, por lo que "hay que hacer una obra de reparación muy importante". Para ello quieren que antes se evalúe si el centro será rentable "tanto desde el punto de vista social como económico", apuntó. "Si no fuera así, se buscará con los vecinos otra salida para el local", adelantó.

El Imas va a iniciar un estudio para evaluar la demanda, que estará listo previsiblemente en unos meses. López no descarta que se incluya entre los usuarios de la guardería a niños de zonas próximas como la nueva barriada de Río Tinto, o la de Santa Lucía, con la que se comunicará próximamente La Cañada a través de la pasarela peatonal en construcción. López valora como un elemento positivo que "se trata de un barrio en el que vive gente muy joven con niños pequeños, clientes potenciales para la guardería", afirmó.

UN ACERADO Otra de las reivindicaciones más antiguas de esta barriada es la urbanización de un acerado paralelo a la vía que une la rotonda del ferial con la de la carretera de Badajoz, por la que se accede a La Cañada. Miguel López entiende que es "una obra justificada porque se trata de una salida peatonal por la que además pasea mucha gente", según explicó a este diario. En todo caso, el edil advierte de que se trata de una dotación que revierte "cierta dificultad", no solo por la inversión, sino porque la titular de los terrenos es la Junta de Extremadura, "con lo cual el ayuntamiento no puede actuar allí", señaló.

Lo que harán por el momento es plantear a la Administración regional "la necesidad de abordar el proyecto", con el fin de que esta determine si lo abordan en solitario o conjuntamente con la local. López espera que a lo largo del 2008 "se inicie la redacción de un proyecto técnico", que se dote económicamente en el 2009 y que se incluyan en él mejoras en la iluminación de ese tramo

También se planteó al actual presidente vecinal, Juan Morán, la posibilidad de trasladar algunas de las actividades de Valhondo a la casa de cultura de la barriada. El edil cree que las instalaciones de este inmueble están "infrautilizadas" por lo que, "si bien lo de los locales de ensayo habría que estudiarlo para que no plantee problemas, otras actividades como las teatrales tendrían cabida", propuso.