La comisión de Economía dictamina hoy un expediente atípico por el tiempo que llevaba sin atenderse la deuda y porque se puede recurrir al remanente de tesorería para su financiación tras haberse cerrado en positivo en los dos últimos años liquidados. La deuda es de casi 2,5 millones de euros y obedece a contratos que ya ni siquiera están vigor. La partida de mayor importe son los 2 millones que se deben a Conyser de revisiones de precios de las últimas anualidades de su anterior contrato para la limpieza viaria y la recogida de basura. El actual empezó en el verano de 2006. De esos 2 millones, la mitad es de intereses. La otra partida es con Canal de Isabel II y suma 438.898 euros de los últimos cuatro años del contrato de gestión de los parques y jardines. Ambas son deudas que están pendientes de su aplicación al presupuesto y que se pueden sufragar con cargo al remanente de tesorería de 2016, que fue positivo en 7 millones.

Con esta operación lo que se hace es una modificación del presupuesto con la incorporación de nuevo crédito, que es el procedente del remanente, para financiar las deudas que se reconocen en las cuentas municipales. No es la única operación de este tipo que se lleva a la comisión de hoy. Hay otra para atender débitos de obras por valor de 345.000 euros que también se financia con el remanente de tesorería.