El concejal delegado de innovación y e-gobierno, Víctor Santiago, aseguró ayer que su intención es retirar la escalera metálica instalada en junio para comunicar la calle San Roque, en las inmediaciones de su confluencia con Mira al Río, con el jardín de la Judería. Su colocación originó quejas de vecinos por motivos de seguridad. Santiago explicó que esas protestas continúan y manifestó que además está su efecto estético y que no tiene el uso esperado. Su instalación se decidió a finales de la anterior legislatura y se costeó con participación de fondos europeos, competencia que en la nueva corporación municipal recae en Santiago.

El edil precisó que no puede ofrecer una fecha sobre cuándo se retiraría la escalera, dado que depende de que se cuente con disponibilidad económica y se está al final del ejercicio presupuestario del 2007. "El coste y el cuándo no lo sé, pero la intención es quitarla", manifestó el concejal, que lamentó que "se gastase un dinero" en una escalera que tiene una incidencia estética sobre la cara este de la muralla. El edil consideró que lo más adecuado es que al jardín de la Judería se continúe entrando por el callejón al que se accede desde la calle Hernando Pizarro. La zona estancial del jardín está pegada a la torre de los Pozos, donde la concejalía de Turismo proyecta usar las instalaciones municipales de la torre como un centro de interpretación de la cultura judía.