El invierno demográfico es una realidad en la geografía cacereña, donde cada vez hay menos nacimientos y la población envejece. De los 223 municipios existentes en la provincia, 156 perdieron población en el censo de 2019 (publicado a 1 de enero de 2020) respecto al año anterior. Esto significa que 7 de cada 10 localidades no sólo no son capaces de ganar habitantes, sino que los pierden, y presentan un crecimiento vegetativo negativo que ni mucho menos les favorece.

En concreto, los datos del Instituto Nacional de Estadística revelan que en un total de 44 pueblos cacereños (2 de cada 10) ni siquiera se produjo un sólo nacimiento durante el último año analizado (2018). Pero ahí no queda la cosa. En 145 localidades (6 de cada 10) se registraron entre 1 y 5 bebés a lo largo del año, no más. Por encima de 10 nacimientos únicamente se situaron un puñado de municipios que representan el 15% de la provincia.

Visto el panorama, cualquier ayuda, iniciativa o aliciente resulta bienvenido para incentivar la natalidad, y evitar que Cáceres entre en una dinámica que le lleve a la difícil situación que ya atraviesan otras provincias de interior. Así lo entiende la Diputación, que acaba de anunciar las primeras ayudas por nacimientos o adopciones que tengan lugar en entidades locales con menos de 1.500 habitantes, entre el 1 de enero y el 30 de noviembre de 2020. Los padres podrán contar con una aportación de 1.000 € por bebé siempre que formalicen las solicitudes, vía telemática, a través de la sede electrónica de la Diputación. La cuantía total destinada al ejercicio 2020 asciende a 250.000 €.

Esta primera convocatoria ya ha sido publicada en el Boletín Oficial de la Provincia (BOP) número 0100, bajo el epígrafe ‘Ayudas a la Natalidad o Adopción 2020’, para luchar contra el despoblamiento rural, pero como aclara la Diputación, también para respaldar a los establecimientos comerciales de los pueblos. Y es que las ayudas concedidas deberán gastarse en productos de «alimentación, higiene, farmacia y parafarmacia, necesarios para los nacidos o adoptados, en establecimientos de la localidad, siempre que exista comercio o farmacia abiertos en ella», explica la institución. Si no los hay, se podrán adquirir en cualquier otro pueblo de la comarca.

REQUISITOS

Los beneficiarios deberán tener una renta correspondiente a la unidad de convivencia no superior a los 18.000 euros, y residir en un municipio de la provincia con menos de 1.500 habitantes. En total, según cálculos de este diario, un total de 179 pueblos podrán acogerse a las ayudas, es decir, 8 de cada 10, ya que tan solo 44 localidades superan en la actualidad ese censo.

Dicha convocatoria se encuadra en el ‘Pacto político y social en el marco de las estrategias de desarrollo sostenible contra el despoblamiento’, aprobado en la Diputación por unanimidad para frenar el despoblamiento.