El Ministerio de Interior tratará de paliar el déficit que sufre la plantilla de la Policía Nacional en Extremadura con 98 agentes nuevos a partir del próximo mes de julio, 28 se destinarán a la provincia de Cáceres y 70 a la de Badajoz, según anunció ayer la delegada del Gobierno en Extremadura, Carmen Pereira, en el acto de toma de posesión del nuevo comisario cacereño, José Villar del Saz.

Los nuevos agentes cubrirán un gran número de las vacantes existentes en el catálogo del personal, aunque no todas. De hecho, en Cáceres faltarían aún seis agentes más para completar la plantilla, según confirmó la propia delegada del Gobierno. Los nuevos efectivos se distribuirán de la siguiente manera en la provincia de Cáceres: 15 agentes irán a la capital, 10 a Plasencia y tres a Valencia de Alcántara. En la provincia de Badajoz: 43 a la capital, 21 a Mérida, 3 a Almendralejo y otros tres a Don Benito.

Pereira explicó que la desproporción entre los efectivos destinados a cada provincia se debe a aspectos demográficos y de índice de delincuencia, en los que Badajoz supera a la de Cáceres.

DECLARACION DE INTENCIONES El refuerzo de la plantilla mejorará la eficacia policial y contribuirá a cumplir uno de los retos que se ha marcado el nuevo comisario cacereño, José Villar del Saz: recortar la tasa de criminalidad, ahora situada en 27 delitos por 1.000 habitantes. En su destino anterior, la comisaría de Gijón, logró dicho objetivo en siete años, reduciendo de 46 a 27 dicha tasa.

Villar del Saz, natural de Cuenca, juró su cargo ante una nutrida representación de las autoridades locales y regionales de todos los ámbitos, incluido el comisario jefe de Extremadura, Eusebio Escribano, que le dieron la bienvenida y le ofrecieron su total colaboración institucional.

Ante todos ellos, el nuevo comisario se comprometió a hacer hincapié en la lucha contra los delitos que van en aumento en la provincia, como los robos en locales y en vehículos, así como la violencia doméstica y sin olvidar los robos en domicilio que, aunque están descendiendo, dijo, "crean una gran alarma". Expresó su deseo de ver construida pronto la nueva comisaría y de reducir los tiempos de espera de la atención al ciudadano.