Como ocurre al final de cada legislatura, los equipos de gobierno inician los preparativos para continuar agarraos al sillón del consistorio. Es entonces cuando comienzan a hacer los deberes cuando el nerviosismo aflora e intentan maquillar su gestión de cuatro años con mejoras en las infraestructuras para, de ese modo, pregonar el esfuerzo que realizan y lo sensibles que son a las necesidades de sus convecinos.

Así está ocurriendo en Jaraíz de la Vera donde tres meses antes de las elecciones municipales, están iluminando el paseo que va desde este municipio a Torremenga de la Vera, obras que por cierto, se han demandado clamorosamente durante cuatro años, pues es una ruta por la que pasean todos los días cientos de personas. Pero, qué casualidad, es ahora cuando las empiezan a acometer. Si piensan que con este guiño nos van a contentar, que no se hagan ilusiones, y que no minusvaloren la capacidad de nosotros, los jaraiceños, para saber cuándo nos están manipulando. El voto hay que ganárselo, que no nos den una bola de pan a cambio de una fruta, como les hacen a los cerdos truferos.

Juan Carlos López Santiago **

Jaraíz de la Vera