El Sindicato Federal Ferroviario de CGT lamenta "el incremento del deterioro ferroviario que ya venía sufriendo la provincia de Cáceres" tras la división de Renfe en dos empresas: Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (ADIF) y Renfe Operadora, la primera encargada de las infraestructuras propiamente dichas y la segunda de los trenes. Según CGT, esta escisión ha provocado que "el déficit ferroviario sea aún mayor respecto a otras provincias de la misma categoría".
Según afirma el sindicato en un comunicado remitido a EL PERIODICO, "se han desviado trenes como el TECO Madrid-Lisboa, que circulaba por Cáceres y ahora lo hace por vía Ciudad Real-Mérida-Badajoz para potenciar la futura línea de mercancías Sines-Valencia, aunque recorra 100 kilómetros más sin ninguna intervención ni justificación que no sea política".
Además, CGT agrega en su comunicado que ahora "le ha tocado" a las estaciones de Casar de Cáceres, Río Tajo, La Bazagona y Cañaveral, ya que prácticamente permanecen inactivas desde el 20 de diciembre. "Tememos que sea el paso previo a un cierre definitivo", augura. El sindicato explica que Cañaveral tiene servicio de viajeros y venta anticipada de billetes, pese a lo cual se encuentra cerrada en el turno de mañana, "obligando a los viajeros que llegan a la estación a volver por la tarde o a desplazarse a Cáceres. Más grave aún si tenemos en cuenta que es el punto de referencia de la zona de Coria y Gata", recuerda.
Asimismo, CGT denuncia "la falta de seguridad" que se produce al estar la estación cerrada, con la subida y bajada de viajeros, sobre todo en el Talgo, "que es el tren más solicitado especialmente en días de vacaciones". Por último, el sindicato lamenta "la pasividad de las autoridades locales y regionales".
