Emitir un veredicto por un jurado popular no es solo decir "culpable" o "no culpable", es mucho más. Para llegar a él se ha de responder a una serie de preguntas referentes al caso --lo que se denomina objeto del veredicto-- que, una vez concluidas las sesiones del juicio, entrega la Sala tras ser consensuadas por todas las partes.

Es lo que han hecho los cinco hombres y cuatro mujeres que han integrado el jurado popular del ´caso Montesol´, ir respondiendo una a una las treinta preguntas que incluía el objeto del veredicto, teniendo para ello en cuenta lo visto y oido en las sesiones del juicio.

Pero es que además no solo han respondido con un "probado" o "no probado" a cada una de las cuestiones planteadas --se requieren siete votos favorables de los nueve para las respuestas que supongan condena y cinco para las que conlleven a la absolución--, sino que han tenido que argumentar sus respuestas. Las declaraciones del más de medio centenar de testigos --particulares, hijos de los fallecidos, policías, peritos, médicos...-- a los que han escuchado a lo largo de los cinco intensos días del juicio, así como las pruebas periciales y documentales aportadas, han sido determinantes para ello.

Respuestas clave

Con las pruebas aportadas por peritos y testigos, claves del veredicto, se pueden dar respuesta a muchas de las preguntas que hoy están en la calle, como por ejemplo la de ¿cómo pudo una mujer sola acabar con la vida de dos personas? Claves para responder a esta cuestión serían dos de las preguntas del objeto del veredicto a las que el jurado respondió "probado".

Los dos hechos concretos planteados en las mismas que los miembros del jurado declararon probados --hubieron de basarse para ello en las declaraciones de los médicos forenses en el juicio-- es que en el momento de los crímenes Juan Antonio Torrecilla, de 54 años, presentaba un estado de embriaguez que limitaba su capacidad de defensa y reacción; al igual que no lo tuvo su mujer, de 51, que por su medicación, y como se había puesto de manifiesto en el juicio por testigos y peritos, "estaba siempre como zombi".

Otros hechos que el jurado de este caso ha declarado probado es que pasadas las 14.30 horas del 21 de octubre del 2008 Angela Aparecida, que ya no trabajaba para el matrimonio, acudió a casa de este con la intención de pedir que la pagaran lo que le debían; y que pasadas las 15.00 horas se inició una discusión en la que "sorpresivamente y aprovechando que Juan Antonio estaba tumbado en el sofá y había bebido alcohol, le golpeó con un objeto romo y contundente en la cabeza causándole la muerte".

Probado también que después, al ver que la mujer, que se encontraba sentada en el mismo salón "como ausente por la medicación", gritó "Angela la golpeó con el mismo objeto y luego la acuchilló varias veces, seccionándola con una de ellas la yugular, lo que la causó la muerte".

Culpable, en definitiva, de causar la muerte de Juan Antonio Torrecilla y Mercedes García de las Heras, teniendo en cuenta los hechos contenidos en las preguntas a las que, como las citadas, respondió el jurado "probado". Algo que hizo, además y como ya se ha indicado, con argumentos, tales como: "Ya que todos los testigos y las pruebas periciales así lo confirman", "...teniendo en cuenta las declaraciones de los hijos", "por las numerosas pruebas de peritos, policías...", "...por las incongruencias en las declaraciones de doña Angela"...

Claves para imputar en el crimen a Rafael Sánchez había sido la declaración de Angela, que dijo encontrarse en el garaje de la casa del matrimonio en el momento del crimen y haber oido hablar al chófer y a Juan Antonio decir "Rafa, ¿pero que haces?"; y para implicar a Manuel Romero, el hecho de que el día del crimen tiró a un contenedor la bolsa con ropa manchada de sangre que Angela le había dado --Recordar que el primero la había acogido en su casa cuando fue despedida por el matrimonio--.

Y claves para declarar a ambos "no culpables" han sido las respuestas de "no probado" dadas por el jurado a preguntas relacionadas con estos hechos. Así, a todas las cuestiones planteadas en relación a que Angela y Rafael hubieran urdido conjuntamente un plan para, con el fin de robar el dinero que el matrimonio tenia en casa, acceder por la puerta del garaje, y que una vez dentro, y al ser sorprendidos, iniciarse una discusión en la que ambos golpearon y mataron al matrimonio, el jurado respondió "no probado". La misma respuesta que dieron a preguntas tales como si Manuel sabía que en la bolsa que le dio Angela para tirar al contenedor estaba la ropa manchada de sangre del crimen.

Pendientes del fallo

Son las anteriores algunas de las claves del veredicto por el que un jurado popular integrado por 5 hombres y 4 mujeres ha declarado culpable del doble crimen de Montesol solo a la asistenta del matrimonio asesinado.

Ya hay fallo popular (veredicto) y ahora habrá que esperar al judicial, pues el jurado declara culpable o inocente, pero es a la magistrada que ha presidido el juicio a la que corresponde fijar condena o absolver. Tras el veredicto habrá ahora que esperar, por tanto, a la sentencia, que se sabe que, sin duda, será absolutoria para Rafael Sánchez y Manuel Romero, pero en la que se desconoce qué condena se establecerá para Angela Aparecida, para la que el fiscal pide 38 años de prisión por dos delitos de asesinato, y 40 años la acusación particular.