El Colegio Mayor Francisco de Sande, situado en la plaza de Pereros y perteneciente a la Diputación Provincial de Cáceres, reabrirá sus puertas en el curso 2018/2019 tras la remodelación a la que se va a someter el edificio para adecuarlo a nuevos usos ya que, además de residencia universitaria, servirá también como alojamiento de turismo idiomático o para realizar intercambios de alumnos de otros países.
La idea del actual equipo de Gobierno es que el edificio vuelva a recuperar su uso como residencia universitaria pero mejorando el servicio y las infraestructuras, por lo que se rebajará el número de plazas que se ofrezcan, que quedarán en unas 60, pero se ganará en accesibilidad y en comodidad tanto de las habitaciones de los estudiantes como de las estancias de los servicios comunes.
De momento, el presupuesto de la institución provincial para 2016 tiene consignados 1,5 millones de euros del total de tres millones que costará la obra de reforma que se realizará en este inmueble del siglo XVI, situado en el corazón de la parte antigua de la ciudad, y que cerró sus puertas el terminar el curso 2013/2014 por decisión del anterior equipo de Gobierno provincial al considerar que no era rentable como residencia universitaria ya que apenas tenía demanda.
La presidenta de la Diputación de Cáceres, Rosario Cordero, ha explicado este lunes que se está redactando el proyecto de reforma y que se espera que la primera fase de las obras esté concluida este año y la rehabilitación total culmine "a finales de 2017 o principios de 2018" por lo que se podría retomar la plena actividad para el curso siguiente.
Cordero ha realizado estas declaraciones a preguntas de los medios sobre este asunto en el transcurso de la presentación del Plan de Formación de la Diputación de Cáceres para 2016 que llegará a más de 1.400 empleados públicos de la administración local.
No obstante, Cordero ha recordado que como se quiere dedicar a otros usos para sacarle más provecho, no se descarta que antes de que empiece ese curso pueda ya utilizarse como lugar de acogida de alumnos que vienen a aprender el idioma o para intercambios internacionales con otras universidades.
En septiembre del año pasado, la presidenta de la institución provincial y el rector de la Universidad de Extremadura (Uex), Segundo Píriz, mantuvieron una reunión para impulsar de nuevo la actividad en este centro universitario que dejó de prestar servicio como residencia de estudiantes.
El anterior Gobierno del PP inició un proyecto para convertir esta casa palacio en un centro museístico que mostrara la historia de la provincia y los usos y costumbres de la población pero, con la vuelta del PSOE a la institución provincial se aparcó esta idea y se retomó la de volverlo a abrir como residencia universitaria.
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