El momento más tenso del pleno tuvo lugar en el turno de intervenciones ciudadanas. Juan Baz Acedo, en nombre de su madre, de 90 años, dependiente, criticó la subida de las tasas del Servicio de Ayuda a Domicilio por considerarlas "abusivas, injustas, inhumanas e insolidarias", ya que, dijo, en algunos casos llegan casi al 900%.

La alcaldesa le respondió que "precisamente por la atención a los que más lo necesitan se han revisado las tasas, que no se hacía desde 2002", y facilitó los nuevos tramos, según los cuales 456 usuarios pagan entre 0 y 3,26 euros la hora, y 172 abonan entre 5,12 y 9,30. Al referirse expresamente al caso de alguien que debe pagar 9,30 y concretar sus ingresos, sin dar nombres, Juan Baz recriminó la actitud de la alcaldesa y salió del pleno dando un portazo.