Agentes del Cuerpo Nacional de Policía de Cáceres detuvieron ayer en la ciudad a dos jóvenes estudiantes, M. B. F. y F. G. G., ambos de 22 años, naturales de Badajoz y sin antecendentes policiales, por un presunto tráfico de estupefacientes.

Fuentes policiales informaron ayer a este diario que la detención es el resultado de investigaciones llevadas a cabo por funcionarios adscritos a la Comisaría Provincial de Cáceres en colaboración con los de la Comisaría de Huelva, "unas investigaciones con las que se pudo determinar el posible tráfico de estupefacientes por vía de empresa de mensajería desde Huelva a esta ciudad".

Ante este hecho, la comisaría cacereña estableció un dispositivo de seguimiento que dio como resultado la intervención, en una empresa de paquetería, de un paquete destinado a uno de los detenidos. "En el paquete, que fue interceptado en el momento de efectuarse la entrega a su destinatario y abierto en presencia judicial, se encontraron cuatro bolas, del tamaño de un huevo, así como 46 bolitas del tamaño de una bellota, de hachís".

La policía estima que la cantidad de droga incautada podría haber llevado al mercado unas 1.500 dosis de hachís, superándose en su venta los 2.500 euros.

SENTENCIA JUDICIAL

Por otra parte, por un delito contra la salud pública, la Audiencia Provincial de Cáceres ha condenado a tres años de prisión y 3.000 euros de multa a Angel Silva Vargas, vecino de Plasencia.

Según consta en la sentencia de la Audiencia Provincial, ha quedado probado que Angel Silva Vargas, "que no es consumidor de ninguna sustancia tóxica", vendía droga a terceros desde una furgoneta que tenía estacionada frente a su domicilio, sito en la calle El Olivo de Plasencia.

La policía le detuvo el día 2 de enero del 2002, interviniéndole dentro de la furgoneta un envoltorio de plástico que contenía cocaína y heroína mezcladas con un peso total de 18,22 gramos.