Durante el último ejercicio completo (2018) perdieron la vida en las carreteras españolas 1.806 personas, cifra lamentable que no obstante supone una reducción de 24 víctimas respecto al año anterior. Un pequeño descenso para la DGT, que ve necesario continuar implementando medidas que pongan freno a la accidentalidad. Por ello, a raíz del último balance anual, Tráfico recuerda los factores que más inciden en los siniestros: las distracciones siguen siendo desde 2016 la primera causa, ya que provocan el 32% de los accidentes mortales (desciende un 1% en un año); la velocidad, con el 22% (baja 7 puntos); y el alcohol/drogas, con el 21% (un 5% menos).
LOS MÁS VULNERABLES / También preocupa a la DGT que el 48% de todos los fallecidos se encuadren en los llamados colectivos vulnerables: peatones, ciclistas y ciclomotoristas, lo que representa un 2% más que el año anterior. La cifra real es muy elevada: 865 usuarios vulnerables perdieron la vida en 2018: 58 ciclistas (43 de ellos en carretera y 15 en ciudad), 359 motoristas (241 en carretera y 118 en ciudad), 62 usuarios de ciclomotor (35 en carretera y 27 en ciudad), y 386 peatones (149 en carretera y 237 en ciudad).
Otro dato destacado es el aumento de los fallecidos de más de 65 años, con 496 (31 más que el año anterior). Y es que los mayores representan el 19% de la población, pero suponen el 27% de las víctimas mortales. Además, este grupo de edad supera ya a todos los fallecidos en accidentes en vías urbanas. El 62% perdieron la vida en siniestros en carretera y el 38% en ciudad. En vías interurbanas, más de la mitad de los mayores de 65 años fallecidos eran conductores, mientras que en ciudad, el 82% eran peatones.
En cuanto al resto de franjas de edad, aumentan también, pero en menor porcentaje, los fallecidos entre 15 y 24 años, y 35 a 44 años. En el resto de horquillas de edades disminuyen.
Todo ello mientras se eleva la actividad en las carreteras: en un año han aumentado un 7% las matriculaciones, hasta alcanzar un parque nacional de 35.188.690 vehículos, y se ha incrementado también un 23% la expedición de permisos de conducir, situando el censo de conductores en 26.853.754.
