Doce años de prisión es la condena impuesta por la Audiencia Provincial a un joven soldado de 25 años acusado de violar a una anciana de 79. El fallo judicial establece además la prohibición de aproximarse y comunicar con su víctima durante cinco años y a pagar a ésta una indemnización de 25.600 euros, 25.000 por los daños morales y 600 por las lesiones sufridas.
José Marcial A. C., que fue juzgado el pasado día 21, admitió en la vista haber forzado a la mujer, pero no la violación. Ante esto, su abogado, por estimar que sólo se le podía acusar de un delito de agresión sexual y, además, con las atenuantes de embriaguez y trastorno de personalidad, pidió un año de prisión.
El fiscal y la acusación particular, por su parte, solicitaron para el procesado 13 y 15 años de prisión respectivamente, por considerar probada la violación y de aplicación el agravante de existir "clara superioridad del agresor sobre la víctima, pues abusó de una persona con un deterioro físico y psíquico demostrado".
Ahora, la Audiencia ve probado que José Marcial A. C., sobre las 09.00 horas del 4 de mayo del 2003, violó a la anciana en su casa de la barriada cacereña del Espíritu Santo, a la que él pudo acceder al confundirle la mujer con la persona que esperaba para que le arreglara una persiana; así como que ella, pese a su minusvalía física y su leve deterioro cognitivo senil, intentó evitarlo.
La sentencia establece que los hechos declarados probados, "por las manifestaciones de la víctima y los contundentes y claros informes médicos", son constitutivos de un delito de violación, y estima de aplicación la agravante, "pues la edad y enfermedad de la víctima la hacían especialmente vulnerable".
