El plan integral de torres y muralla incluye una estimación de la inversión necesaria para su ejecución, con un coste por tramos y por acciones a realizar en primera y segunda fase. Para la ejecución de todas las intervenciones propuestas en el estudio se necesitaría una inversión de 4 millones de euros, de los que 2,2 se destinarían a obras y los 1,8 restantes a la adquisición de inmuebles y propiedades privadas.

Para las primeras actuaciones se cuenta con fondos del Plan de Excelencia Turística. El concejal Manuel Rodríguez Cancho aseguró el pasado miércoles, tras la reunión de la comisión de seguimiento del citado plan, que para las intervenciones que se van a acometer en los Pozos, Púlpitos y Torremochada hay una dotación de casi medio millón de euros.

Las obras propuestas en el plan integral son principalmente para la consolidación y limpieza de los monumentos, y para garantizar la accesibilidad a los mismos con las medidas de seguridad necesarias. Una de las premisas recogidas en el plan integral es que "en ningún caso las propuestas y su desarrollo pueden afectar negativamente al estado de conservación de la muralla". En todos los enclaves son necesarias las adquisiciones de propiedades, debido a que en el plan integral se prevén demoliciones "puntuales" de inmuebles adosados al lienzo para la "puesta en valor" de la muralla.

ESTUDIO POR TRAMO Cada uno de los enclaves que se proponen hacer transitables se analizan en el plan integral desde cinco aspectos: interés patrimonial, la propuesta a corto y medio plazo, las posibilidades de acceso, su estado de conservación y las obras y acciones necesarias que se tienen que ejecutar en cada tramo.

El objetivo del plan es hacer más atractiva la visita al centro histórico y prolongar la estancia del turista en la ciudad.