Si como sostienen muchos arquitectos el diseño de un edificio contribuye al bienestar de las personas, visitar la oficina del paro en Cáceres podría resultar a partir de ahora menos traumático de lo habitual. La futura sede del centro de empleo cacereño, cuya construcción se ultima estos días, ha puesto un nuevo toque de modernidad en la anodina avenida de la Hispanidad.

A pocos metros del tanatorio San Pedro de Alcántara, se levanta un enorme cuadrado de líneas puras y diseño vanguardista revestido de acero blanco impoluto, roto solo por el color llamativo del interior de las ventanas invertidas. El edificio, de unos 2.400 metros cuadrados y firmado por el arquitecto emeritense Rafael Mesa (Museo del Agua o el Museo Abierto de Mérida), no pasa inadvertido entre las construcciones convencionales, exceptuando el Palacio de Justicia, que lo circundan.

La Junta, que ha invertido en él algo más de tres millones de euros, prevé su apertura en breve. Albergará la sede del Servicio Territorial del Sexpe y centro de empleo. Un cascarón de vanguardia para la cola del paro.