Fue detenido en julio del 2008 con cuatro gramos de cocaína y hoy se sentará en el banquillo de los acusados para ser juzgado por un delito contra la salud pública, en su modalidad de tráfico de drogas de las que causan grave daño a la salud, por el que el fiscal pide una pena de cuatro años y medio de prisión, y multa de 1.500 euros.

Es la condena a la que M. Fernández se enfrenta por unos hechos ocurridos hace apenas un año. Según los hechos considerados probados por el fiscal, sobre las 20.00 horas del 30 de julio del 2008 el acusado, al que la policía sometía a un seguimiento por sospecharse que se dedicaba a la venta de cocaína, fue detenido por agentes del Cuerpo Nacional de Policía cuando accedía a un céntrico bar de Cáceres. Se le sometió a un cacheo en el que se le intervinieron 9 papelinas, que contenía un total de 4,04 gramos de cocían, así como 50 euros fruto de una venta previa.

Posteriormente practicaron un registro en su domicilio, en el que se intervinieron otros 44,62 gramos de la misma sustancia y diversos efectos para su preparación en dosis.

La totalidad de la cocaína intervenida tenía en ese momento un valor de 2.940 euros.