Ocurrió en Casar de Cáceres. Dos agentes de la Policía Local se encontraron con el acusado, que estaba recriminando a otra persona porque le había causado daños al vehículo de su esposa, que estaba aparcado en las inmediaciones. Trataba de agredirle, por lo que los agentes intentaron evitarlo. Comenzó entonces un forcejeo porque el acusado se resistía a cesar en su actitud agresiva. En el transcurso del mismo el policía cayó al suelo sufriendo lesiones que tardaron cinco días en curar. Se rompió además la pantalla de su teléfono móvil, que le costó reparar 200 euros.

El Juzgado de lo Penal Número 2 de Cáceres le condena ahora a pagar una multa de 1.440 euros por un delito de resistencia a la autoridad y a abonar otra multa de 240 euros por otro delito de lesiones. Además deberá indemnizar al agente con 150 por los daños ocasionados y a abonarle la cantidad que le costó reparar su teléfono móvil. La sentencia no es firme, cabe recurso a la Audiencia.