No ha tardado en reaccionar el Ayuntamiento de Cáceres ante la información publicada ayer por este diario en torno a la situación que padecen desde hace meses los vecinos del céntrico barrio de Colón y su entorno. El concejal de Obras, Victor Bazo, anunció que dará traslado a los servicios técnicos para la revisión de los alcorques, realizar un bacheo provisional, acometer una revisión integral de la zona y encargar a la empresa concesionaria del servicio de limpieza, Conyser, una acción más profunda.

Bazo reconoció que tanto Colón como Camino Llano tienen pendientes la renovación del saneamiento a través de la empresa del agua, Canal de Isabel II. Indicó que se estaba a la espera de la terminación de las obras del Museo Helga de Alvear a su paso por Camino Llano dado que el tránsito de vehículos es constante y deteriora el firme. «La previsión es la renovación del saneamiento y el asfaltado integral entre este año o el año que viene». Dada la tardanza en los plazos, el ayuntamiento tratará de acometer una actuación de urgencia.

La situación de la calle Colón ha saltado a la primera plana de la actualidad municipal tras la avería de agua registrada en la plaza de Conquistadores en la madrugada del pasado martes. Aunque ya resuelta, la incidencia obligó a abrir un agujero a la altura del local ocupado por última vez por una sucursal de La Caixa. Ayer por la tarde los operarios estaban trabajando en su reparación, una labor que compete a Canal. Fuentes del Área Técnica de la empresa confirmaron que habían dado comienzo los trabajos de reposición del relleno, «que junto con el hormigonado, reposición de pavimentación y demás, podrían estar terminados entre lunes y martes».

Lo cierto es que las quejas de los vecinos de la plaza y calle de Colón están más que justificadas porque llevan sufriendo esta situación desde hace meses: carteles publicitarios que llenan fachadas, papeleras pintadas con grafitis, excrementos de perros en las aceras, alcorques en mal estado, firme levantado, baches... Una situación a la que se ha unido la importante avería de agua. La rotura, tal como ya informó este diario, se produjo porque las raíces de un árbol estaban apretando el tubo conductor de tal manera que acabó reventándolo. Por este motivo se cortó el árbol y los bloques de viviendas correspondientes a los números 9 y 11 estuvieron sin suministro.

La concesionaria del servicio de agua informó de haber sustituido el tramo de tubo por otro de características similares, cuando el tramo reparado se sustituyó por otro material, más actual, de fundición dúctil, en lugar de la fundición gris averiada. La avería provocó la salida de tal cantidad de agua que la corriente llegó hasta Camino Llano.