Las obras de ampliación del centro de artes visuales Helga de Alvear han dejado al descubierto antiguas canalizaciones de agua. Desde la calle Camino Llano se pueden observar dichas construcciones que ya han sido analizadas por el arqueólogo de la obra. Según confirmó a este diario la Junta de Extremadura estas canalizaciones son comunes por esa zona de la ciudad y no son de relevancia histórica, por lo que no ha sido necesaria la paralización de los trabajos.
La ampliación ha tenido que detenerse ya en dos ocasiones (una por orden del ayuntamiento y otra por el juzgado) por los daños causados al hotel Albarragena y al pub Las Caballerizas tras la demolición de un muro que separaba el centro cultural de los anteriores.
La ampliación servirá para sumar 5.000 metros cuadrados al centro, que tendrá 8.000 metros, la mitad dedicados a salas expositivas. El nuevo edificio mantendrá la fachada actual de la casa situada al lado del actual museo, y además se levantará otro inmueble de tres plantas que ocupará 700 metros del jardín. El recinto está concebido para buscar la unión entre el casco histórico y el centro urbano, con la previsión de poder inaugurarlo en 2017.
Las obras supondrán un coste de 10 millones de euros financiados a partes iguales por la Junta de Extremadura y la propia Helga de Alvear, que cede también la casa anexa al actual edificio y sufraga el millón de euros que ha costado el proyecto arquitectónico. La Universidad de Extremadura aporta los terrenos del jardín que se utilizará para la ampliación (2.300 metros cuadrados).
