Crisis financiera o inmobiliaria. O crisis sin más. La cuestión es que la venta de vivienda, tanto nueva como usada, ha caído en picado en los últimos meses. Las principales inmobiliarias españolas han vendido en los tres primeros meses del año un 73,5% menos que en el mismo periodo de 2007. En Cáceres, varias agencias inmobiliarias se han visto obligadas a cerrar y algunas de las que siguen trabajando creen que cajas y bancos están restringiendo en exceso la posibilidad de que sus clientes consigan el crédito que necesitan para comprar una vivienda.

Juan José Talavera, gerente de Gestocasa, cree que algunas entidades incluso "desaniman a comprar a posibles clientes" con argumentos como "no es el momento de comprar, yo creo que esto va a bajar". En muchos casos no se llega siquiera a analizar si a ese cliente se le concede o no el préstamo, según Talavera.

El gerente de Gestocasa no ve justificación a ese celo extremo de las entidades "porque en España, las hipotecas se pagan". Y los datos le dan la razón. La morosidad de los préstamos hipotecarios en Extremadura se situó en el último año en el 0,45%. La media española el pasado mes de febrero era del 1,12%.

Exageraciones

Fernando Belloso, asesor inmobiliario de Gestocasa, cree que "hay que intentar ponerle un poco de freno a esta situación de pánico que se está creando". Belloso señala que "hace cuatro años estábamos por debajo de un 3% de interés. Ahora estamos por encima de un 5%. Hace 15 años era un 18% y nadie se asustaba de los tipos de interés". Belloso cree que los medios de comunicación, y sobre todo la televisión, han tenido bastante que ver en generar esta situación.

Los representantes de las inmobiliarias creen que mejor momento para comprar que el actual no hay "porque los precios han bajado entre un 10 y un 15% en el último año para la vivienda de segunda mano", dice Talavera. Fernando Belloso afirma que lo mismo sucede con la nueva construcción, "que está dispuesta a negociar los precios o a buscar fórmulas para no dejar escapar al cliente". Entre las opciones que cita Belloso están los alquileres con opción de compra, que la empresa compre la vivienda antigua, que asuma el pago del IVA o que regale un coche.

Carmen Jáuregui, asesor inmobiliario de Oikos Multigestión lo corrobora: "Ahora se está comprando a un precio muy bueno", dice.

Vuelta a la ortodoxia

Varios directivos de entidades financieras de Cáceres consultados por este diario matizan ese endurecimiento en la concesión de hipotecas. "Los bancos sí estamos endureciendo las condiciones para conceder hipotecas" --dice uno de ellos--. "Pero lo que ha pasado es que se ha vuelto a la práctica que siempre ha debido hacerse: conceder no más del 80% del valor de tasación y pedir unas garantías, pero los requisitos que pedimos a las personas no han cambiado". Todos coinciden en que lo decisivo a la hora de conceder o no una hipoteca es "además del valor de tasación del inmueble, la capacidad de reembolso de la persona".

También afirman que simplemente se tramitan menos hipotecas "porque entra menos gente a pedirla. Los clientes saben que el mercado está en una situación de impasse y hay muchas expectativas de que los precios bajen". El tiempo dirá si va a ser así.