El propietario de la carnicería Valen, Valentín Garzo, asegura que aún es pronto para obtener beneficios de la reforma, «me imagino que en un futuro los tendrá, por el momento ha sido al revés». Porque lo que afirma es que se han generado quejas por parte de todo el barrio, «no hay aparcamientos, dicen los vecinos». Además, las ventas han bajado y «se ha notado, el tiempo que ha estado la calle cortada aquí no entraba nadie, llevamos tres meses malísimos», explica.