"Yo ganaré 2.072 euros brutos al mes como alcalde, pero es que el portavoz del PSOE gana 6.000 por estar liberado en la Junta". Así se expresa Alvaro Arias, alcalde de Valdefuentes, localidad cacereña donde las retribuciones del primer edil han desatado el huracán de la polémica. Todo comenzó cuando en el último pleno el Partido Socialista criticó que el primer edil se haya asignado "un sueldo mensual de 2.500 euros", una decisión adoptada sin informar previamente a la oposición y en un momento en el que Valdefuentes mantiene una deuda con Hacienda cercana a los 300.000 euros, según aseguran los socialistas, que van más allá y alertan de que el ayuntamiento se encuentra intervenido y ha subido sus impuestos de forma notable en los últimos años.

La reacción de Alvaro Arias no se ha hecho esperar. Con nóminas incluidas que muestra a El Periódico Extremadura, acusa de hipocresía al PSOE, dice que miente, argumenta que su sueldo no es de 2.500 euros como sostiene el único partido de la oposición que hay en el consistorio en la actualidad sino de 2.072 euros brutos, que en netos se quedan en 1.650.

Entiende el alcalde que se trata de un sueldo justo, o más bien ajustado a las funciones que desempeña. Arias insiste que en su trabajo en Asisa ganaba 500 euros más y que, por tanto, poniéndose la liberación ha "perdido dinero", pero que no le importa porque si lo ha hecho "es por defender --enfatiza él-- los intereses" del pueblo que gobierna.

Alvaro Arias lleva 20 años en política, desde hace doce y medio es alcalde. ¿Por qué se libera ahora? Responde que trató de negociar con Asisa una media liberación, pero que el convenio de su empresa no contemplaba esa posibilidad. De manera que optó por la liberación "porque no podía llegar cada día a las siete de la tarde al ayuntamiento" y, a su juicio, un pueblo como Valdefuentes, con más de 1.300 vecinos, necesita una dedicación exclusiva. La polémica ha llevado al alcalde a rastrear en Google y a realizar un estudio que arroja que más de 130 pueblos de la provincia de Cáceres tienen alcaldes o concejales liberados: Alcuéscar tiene tres, Almoharín 1, Sierra de Fuentes 2 o Villa del Rey (con tan solo 130 habitantes) "tiene tres liberados".

Las comisiones

Arias insiste en que liberándose en la alcaldía atiende debidamente a su pueblo y recrimina al portavoz del PSOE que no ejerza debidamente sus funciones. Molesto, el dirigente del PP recuerda que el responsable de los socialistas en Valdefuentes, Ceciliano Franco, está liberado por la Junta de Extremadura por sus funciones como director gerente del Servicio Extremeño de Salud. "Hemos celebrado 12 o 13 comisiones de la Vivienda y solo ha venido a una y yo entro todos los días a las 9 en el ayuntamiento y salgo cuando sea...", apunta el regidor.

El alcalde asegura: "A mí me pedía el pueblo unánimemente que me liberara, excepto los de siempre que son tres o cuatro, (ganó por mayoría absoluta las últimas elecciones con seis concejales del PP frente a tres del PSOE) pero como al final me ha podido más el corazón que la cabeza pues me he liberado ganando 500 euros menos de lo que ganaba en mi puesto de trabajo y lo hago para atender a los vecinos, mientras que el del PSOE se libera para irse del pueblo y no atender a los vecinos. Se liberó en su cargo en la Junta de Extremadura con una asignación bruta más complementos específicos superior a los 6.000 euros mensuales, por eso le ruego al portavoz del PSOE que haga pública su nómina, como he hecho yo".

¿Y qué decir de las deudas que el PSOE achaca al gobierno de Arias? "El ayuntamiento tiene sus deudas, como todos, pero ni mucho menos lo que ellos dicen. Tenemos una cuenta de crédito y hemos levantado una guardería y hemos cumplido un plan de pago a proveedores, se ha pagado un préstamo del pabellón, tenemos adelantado el pago de los trabajadores del PER y de los alumnos de los cursos de formación". Frente a ello, asegura que el PSOE le debe dinero al ayuntamiento. "Su sede debe el IBI y la basura del 2001 al 2009 y el IBI del 2014 y del 2015 mientras que yo como alcalde he puesto el IBI urbano al 0,467 y el rústico al 0,5, que reto a ver si algún alcalde de la provincia lo tiene más bajo", zanja un Alvaro Arias que asegura que si este dato sobre los impuestos no es cierto pone hoy mismo sobre la mesa su dimisión como alcalde. La polémica, sin duda, arde en Valdefuentes.