"Nos gusta la calle Andrada y queremos hacer algo para dejarla bonita". Habla Raúl Lucero, empresario del pub La Machacona que, junto a Jorge Martín, rescataron del olvido hace un año y medio uno de los garitos con más historia de la capital cacereña, situado cerca de la plaza Mayor.

Ahora, la reapertura del recinto les ha movido a limpiar una parte de la calle de grafitis con dinero de su bolsillo para poder instalar una terraza con dos mesas y pufs. "Nosotros pintaremos la fachada que tenemos enfrente. A ver si así podemos contribuir a cuidar la calle", explica Lucero, que deja claro que Andrada se ha convertido en blanco fácil para orines y pintadas de madrugada.

Para poner en marcha la iniciativa de pintar parte de la calle, añade, han contado con el apoyo de vecinos a los que han consultado la idea. En opinión de uno de los responsables de la Machacona, Andrada puede convertirse "en una zona bonita e interesante" para los ciudadanos. El pub quiere ahora darle vida con una terraza aprovechando la sombra por la estrechez de la vía y atraer de esta forma al público en la temporada de buenas temperaturas.

La Machacona propone un plan, síntoma de que la plaza Mayor debería de convertirse en reclamo para vecinos y turistas, tras una remodelación que ha cambiado de arriba a abajo la fisionomía de una zona que estaba pidiendo a gritos un cambio de cara.