La chimenea del salón principal de la finca de Torre Arias (San Blas-Canillejas), que la condesa Tatiana Pérez de Guzmán el Bueno cedió al pueblo madrileño antes de morir, ha reaparecido en el palacio de los Golfines de Abajo de Cáceres. La Asociación Madrid, Ciudadanía y Patrimonio ha solicitado a las autoridades culturales madrileñas que expliquen si han autorizado el traslado a Cáceres de la chimenea, propiedad municipal desde 1986, indica la asociación en una nota.

La chimenea pertenece al consistorio desde que el exalcalde de Madrid Enrique Tierno Galván firmara un convenio con los condes de Torre Arias en virtud del que "la Quinta pasase a propiedad municipal a cambio de los aprovechamientos sobre más de 170.000 metros cuadrados de suelo". Según el colectivo, el acuerdo se desarrolló "con la condición de suspender la entrega de la posesión hasta el deceso de los condes, que hasta entonces la seguirían habitando".

Sin embargo, cuando la última condesa, Tatiana Pérez de Guzmán el Bueno, falleció en 2013 y el consistorio tomó su posesión, la chimenea "ya no estaba en el palacio, habiéndose cegado su tiro con un tabique", dice el comunicado.