En Venezuela hay 34 etnias. Apenas representan un 3% de la población del país. Cada una mantiene una cultura propia y un dialecto. Su estructura es compleja, hasta el punto que las hay como los Pemones, que a su vez se dividen en los Taurepan, los Arekuna y los Kamarakoto. Todos ellos son los habitantes de la Gran Sabana, «el lugar más bello de la tierra», según el monje dominico Isidro Rubio Insausti. Este fue el destino del religioso que estudió filosofía y cine y se ofreció voluntario para las misiones tras recorrer medio mundo grabando un documental sobre su congregación en Asia. Ahora se encuentra en España y sin visado de vuelta, pero en este tiempo, creó una radio, defendió a los habitantes de la sabana de la quema de los bosques y de los magnates que destruyen la selva. «He sido muy feliz porque me he sentido útil», concluye sin rencor y sin saber si volverá algún día.

Precisamente desde Lationamérica viajó el mejicano Victor Hugo García Ulloa hacia Mozambique. También religioso, de la congregación de Daniel Comboni. El misionero, licenciado en periodismo, dirigió Vida Nueva, la única revista del país africano en el que ha vivido 15 años. Su lema este tiempo ha pasado por «salvar África por medio de los propios africanos». Los primeros siete años se dedicó a una labor parroquial entre las escuelas de alfabetización de su congregación y leprosarios y su labor de denuncia en la publicación. «He tenido la suerte de trabajar con jóvenes, son los que cambian el mundo, como los misioneros».

Ambos forman parte de la lista de 84 misioneros de la diócesis de Coria-Cáceres que se reparten en todo el mundo. Según los datos de las obras Misionales pontificias se encuentran de misión 47 religiosas, 26 sacerdotes, 6 religiosos no sacerdotes y 5 laicos. La mayoría se encuentran en países de Lationamérica --Perú, Venezuela y Argentina--. En España hay 12.000 misioneros --el 54% mujeres--. Ayer, la diócesis presentó ayer en Cáceres la próxima campaña del Día Mundial de las Misiones que este año lleva por lema ‘Cambia el mundo’. El acto estuvo presidido por el obispo Francisco Cerro y el delegado episcopal de Misiones, Francisco González. A través de esta jornada, como esta jornada, recaudarán fondos para los religiosos en las misiones. En el país, en 2017 se recaudaron 14 millones, 78.619 euros en Cáceres, un ligero descenso a 2016, año en el que se recaudaron 14 millones y 97.588 euros procedían de la diócesis cacereña.

Así, según precisó ayer González este viernes tendrá lugar la vigilia de la Luz para niños y jóvenes y durante el fin de semana tendrá lugar la cuestación en las calles así como las colectas en las 160 parroquias de la diócesis. En su intervención, el delegado episcopal reclamó más vocaciones misioneras «para que podamos hacer realidad que otro mundo es posible».