Tras año y medio con la tienda abierta, este empresario magrebí no parece muy satisfecho con la elección. "La zona está bajando. Antes en Pintores había mucha alegría" asegura Hicham Bouchrit, primo del responsable marroquí de otra tienda de regalos y complementos en esta misma calle. Es martes por la mañana y el flujo de público por Pintores no tiene mucho ambiente de época prenavideña. Hay poca gente y las tiendas están prácticamente vacías. Las bolsas de las compras no llaman la atención. "Puede ser porque la gente no puede bajar en coche", afirma, a pesar del cercano párking de Galarza con tarifas asequibles.

Entre las ideas para mejorar este eje comercial, el comerciante propone que la plaza Mayor se potencien actividades que ya funcionan, como el mercado medieval, con el objetivo de que haya más visitas. Este comerciante lamenta la instalación de los toldos y sus consecuencias y recuerda el daño causado en las fachadas de las tiendas por el vandalismo graffitero . "Ahora están limpias, pero si pasas dentro de 15 días están pintadas otra vez", indica. Su escaparate, rayado, es un buen ejemplo. Ante esta situación, defiende la necesidad de poner cámaras de vigilancia. Pero, por encima de todo, afirma que el mayor problema para los negocios es el económico al haber bajado las ventas.