Si bien el uso pormenorizado de la Casa Grande es el docente, el edificio tiene otros usos globales compartidos, entre los que se encuentra el hotelero. El céntrico palacete se ubica en una zona protegida por el Plan Especial, que contempla que esta parcela pueda destinarse a ese fin empresarial. Curiosamente, y aunque Cáceres es una ciudad declarada patrimonio de la humanidad, no posee un hotel de cinco estrellas. La venta de este edificio posibilitaría su creación, justo en un momento histórico del apogeo hotelero de la ciudad, con proyectos actualmente en marcha que superan los 30 millones de euros (5.000 millones de pesetas).