Fue un hombre con preparación "en todos los campos" y con una dedicación "completa" a sus ideales demócratas, que actuó "con absoluta honradez y con un deseo de acertar por España", y por tanto constituye una figura "de la que los políticos actuales de todos los ámbitos podrían aprender". Con estas palabras, el presidente del Congreso de los Diputados, Jesús Posada, abrió ayer los actos del Centenario de la Muerte de Segismundo Moret, auténtico impulsor del núcleo minero de Aldea Moret, pero también presidente del Gobierno (1905-1906) y del Congreso de los Diputados (1912-1913).

Posada presidió "con satisfacción" la mesa redonda que inauguró el programa en el Garaje 2.0, antigua nave minera hoy restaurada. Antes, Jesús Posada fue recibido en el ayuntamiento por el presidente de la Asamblea de Extremadura, Fernando Manzano, la alcaldesa, Elena Nevado, y el presidente de la Diputación, Laureano León. Posteriormente realizó unas declaraciones a los medios de comunicación en las que transmitió un "mensaje de esperanza" y de "relativo optimismo" porque, dijo, la actual crisis es parecida a la que se ha vivido en otras épocas "y los españoles las han superado".

Por su parte, la alcaldesa subrayó la importancia de estos actos para salvar la "injusticia histórica" que se ha cometido con Segismundo Moret, "una figura clave en la trayectoria de Cáceres", cuya visión de futuro sobre la riqueza de los fosfatos trajo el desarrollo industrial a Cáceres, así como la línea férrea. En este sentido, Nevado afirmó que "la historia puede volver a repetirse, pero con nuevas herramientas", aludiendo a los centros de creación y desarrollo tecnológico que el ayuntamiento ha creado en esta zona: Garaje 2.0 y Embarcadero.

Los reconocimientos también se dirigieron ayer al comité organizador del centenario, formado por José Pastor, catedrático de Química Inorgánica de la Uex, Francisco López Naharro, presidente del poblado minero, y Eugenio Cantero, perito y profesor mercantil. Todos participaron en la mesa redonda y han promovido una exposición también inaugurada anoche por Posada, conmemorativa del pasado de Aldea Moret, que se mantendrá en el Embarcadero hasta enero.

ASI ERA LA MINA La muestra supone un nostálgico y entrañable paseo por la vieja mina, que llegó a albergar doce pozos de extracción y hasta 120 edificaciones auxiliares. Las fotografías pertenecen al archivo de la antropóloga Ana Isabel López Holguín, nieta del tornero ajustador del taller del yacimiento, a la que muchos vecinos han cedido las imágenes. Otras pertenecen a la colección del profesor universitario José Pastor. En ellas pueden verse desde las antiguas escuelas con sus niños hasta la romería de Santa Lucía, grupos de trabajadores, la iglesia, el entramado con sus fábricas, vistas panorámicas e incluso planos de los yacimientos y los edificios.