Francamente difícil". Así definió la alcaldesa, Elena Nevado, la elaboración de los presupuestos del 2012, los primeros que tendrá la ciudad tras dos años prorrogados. Y es difícil porque los presupuestos nacen con un lastre de más de ocho millones de euros, de los que 7,1 corresponden al déficit de tesorería del ejercicio del 2010, que se tienen que cubrir con cargo a los ingresos del 2012, y con una retención de 1,5 millones en las aportaciones de fondos del Estado (1,2 para compensar el exceso de las cantidades que se concedieron a cuenta en 2008 y 2009 y el resto para pagar la primera anualidad de la amortización de un crédito de 2,8 millones que el Ministerio de Industria dio al ayuntamiento).

Por ahora el gobierno municipal no ha adelantado las grandes cifras de los presupuestos del 2012. "Se están elaborando", fue la respuesta que se dio ayer, aunque la alcaldesa, que además mantiene las principales competencias en Economía, admitió hace una semana que el presupuesto se tiene que aprobar con superávit de 8 millones, en alusión a que se tendrá que planificar con 7,1 millones de euros más de ingresos que de gastos para cubrir el saldo negativo de tesorería del año 2010.

OBLIGACIÓN DE SUPERÁVIT

La legislación de Haciendas Locales obliga a los ayuntamientos a cubrir este saldo negativo y ofrece tres soluciones. Por lo comentado por Nevado se opta por un presupuesto con más ingresos que gastos. Otra de las soluciones es pedir un crédito, pero la deuda viva del ayuntamiento supera ya los 30 millones de euros con la nueva operación con La Caixa.

Cerrar el ejercicio económico con déficit de tesorería no es algo nuevo. Se repite desde la liquidación de la cuenta de 2004. En los años anteriores, cuando se tuvo que atender a este remanente negativo con mayores ingresos que gastos en los presupuestos siguientes, los gobiernos locales tomaban como base el remanente de tesorería sin descontar los saldos que son de dudoso cobro (aquellas cantidades que el ayuntamiento tiene pendiente de ingresar aunque sus posibilidades de cobro son mínimas). Esto hacía que el dato negativo del remanente de tesorería fuese menor y que incluso quedase en positivo. El actual gobierno local no ha aclarado si repetirá la maniobra de los ejecutivos anteriores, aunque por lo dicho por Nevado, que habló de la necesidad de un superávit de 8 millones, se iría al dato más real, restando los saldos de dudoso cobro.

'ERROR' DE ECONOMÍA

El Ministerio de Economía dio a cuenta 15,8 millones al ayuntamiento con cargo a la participación de la ciudad en los tributos del Estado del 2008, mientras que para 2009 se dieron casi 16 millones. Pero los cálculos del ministerio erraron porque se recaudó menos y tras la liquidación se ha pedido a los consistorios que devuelvan lo entregado de más.

El reintegro se hace restándolo de las aportaciones de los ejercicios siguientes y durante sesenta meses, según fija la Ley de los Presupuestos del Estado de los años 2010 y 2011. De 2008 se tienen que devolver 1,3 millones, se está pagando desde este año, y de 2009 toca devolver 4,7 millones a partir del ejercicio 2012.