"Me lleva los diablos". El jefe de servicio de Conyser, Jesús Morán, se muestra así de explícito cuando recuerda un contenedor situado junto a la plaza de toros que Conyser ha decidido no reponer más porque, cada vez que lo hace, aparece quemado. "En tres años hemos puesto cinco nuevos", afirma. "La última vez lo dejamos de reponer, pero los vecinos nos lo reclamaron. A la quinta, ya no lo hemos vuelto a colocar". Nadie supo nunca quién o quiénes eran los culpables de la fechoría .

Esta lamentable anécdota ilustra la relación de intervenciones que, en saco roto, tiene que acometer la empresa de limpieza para paliar el vandalismo en la ciudad. En la calle Río Tíber, en Aldea Moret, las papeleras de plástico eran quemadas casi a diario por lo que Conyser decidió cambiarlas por otras metálicas. "En una semana hemos llegado a cambiar hasta treinta", recuerda Morán.

La presidenta vecinal de Santa Bárbara, Guadalupe Iglesias, se quejó el pasado lunes de que estos hechos siguen repitiéndose. "La única de forma de evitarlo es que la policía vigile la zona. Es muy triste que no vengan. La secreta es tan secreta, que no se ve. Quitan las papeleras para utilizarlas como tambores".

Material de hierro

La responsable vecinal explica también que los actos vandálicos ocurren a partir de las once de la noche, indistintamente de la época de año, aunque los destrozos se agravan en verano. "Hay que ponerlas ya de hierro en todas partes porque es la única forma de que no las rompan", señala. Conyser estudia incluir en su oferta para renovar el contrato de la limpieza cambiar las papeleras de plástico por las de metal. En la ciudad hay 3.600 contenedores y 2.500 papeleras, de las que el 25% son de hierro.

Preguntado por si la vigilancia policial podría reducir el gasto por destrozos, Morán responde que "es una cuestión de concienciación ciudadana y de educación" y dice que hay casos de personas identificadas como autores de destrozos que han tenido que abonar el coste de la papelera, previo informe requerido por el ayuntamiento a Conyser, aunque hay que localizarlos in fraganti .