La concejala de Asuntos Sociales, Marcelina Elviro, explicó ayer que las tres o cuatro familias que cumplen todos los requisitos para salir del bloque C quieren pasar la Navidad en sus nuevos hogares, "y eso es lógico". Por eso el ayuntamiento desea iniciar cuanto antes este proceso, que comenzó durante la legislatura pasada después de que en el bloque C apareciera emparedada una mujer. El suceso conmocionó a la ciudad y en especial al barrio y puso de manifiesto la inseguridad e insalubridad de un edificio que tiene sus horas contadas. El inmueble nunca se destinará a viviendas sino que cumplirá una función administrativa.