Un peatón que resultó arrollado por un vehículo ha conseguido que se le reconozca el derecho a ser indemnizado por una serie de gastos derivados del accidente que en principio no se habían tenido en cuenta. Ya en primera instancia, por el Juzgado se estimó la demanda que interpuso contra el conductor del vehículo y la compañía de seguros, a los que se condenó a pagar, de forma solidaria, una indemnización de 23.886 euros.

Pero el afectado, al que el coche arrolló cuando el conductor daba marcha atrás para salir de un estacionamiento, consideró que también tenía derecho a ser indemnizado por otra serie de gastos no incluidos inicialmente y recurrió a la Audiencia Provincial, que ha estimado su recurso, condenado a la aseguradora a pagarle 6.000 euros más.

En concreto, se estima que, debido a la naturaleza de las secuelas resultantes y a la avanzada edad del interesado, éste ha tenido que hacer frente a determinados gastos diferentes de la indemnización que contempla el baremo y que se deben cubrir por la aseguradora, como los relativos a las facturas de taxi empleado para trasladarse al centro de rehabilitación, gastos quirúrgicos y ortopédicos, de bastones y de instalación de un elevador en la escalera y sustitución de la bañera por un plato de ducha.