Los ladrones han elegido esta vez el Club de Tenis Cabezarrubia y han logrado llevarse de sus instalaciones un taco y medio de lotería de Navidad, con participaciones de 10 euros, que suman un total de 1.500 euros, según confirma a ete periódico David Chaves, gerente del centro deportivo, uno de los más tradicionales de la ciudad.

Las papeletas que se llevaron los cacos van de la 347 a la 400, porque van numeradas, y el taco entero desde las 201 hasta la 300. Ahora las papeletas que valen son las que van numeradas de la 1 a la 200, de la 301 a la 346 y desde la 401 a la 600. Las que robaron, lógicamente, no son válidas.

Para ello, la directiva del club se ha visto obligada a publicar que esas participaciones ya no tienen validez puesto que los ladrones las han podido vender. El club ha remitido correos electrónicos a todos los asociados y además ha descrito los hechos en las redes sociales, además de poner en conocimiento de la policía lo sucedido.

El robo tuvo lugar la noche del pasado 24 de noviembre. Los ladrones ocasionaron importantes destrozos, rompieron la verja, reventaron la caja fuerte y se llevaron dinero en efectivo. Los daños que ocasionaron los cacos están valorados en más de 7.000 euros.

El principal promotor del club de tenis fue Luis Canalejo. En aquel entonces Orencio Carrascal y un grupo de 22 aficionados, con más entusiasmo que medios, se lanzaron a la búsqueda de terrenos donde ubicar las pistas del nuevo club, el ayuntamiento llegó incluso a adjudicar una parcela en las inmediaciones del Cerro de Cabezarrubia, que posteriormente fue denegada, hasta que Julio Gómez, propietario de un terreno en la zona conocida como Santa Fe, vendió a un precio asequible 33.000 metros cuadrados que dieron lugar en septiembre de 1971 a lo que fue el Club de Tenis Cabezarrubia. La cuota de inscripción estaba entonces en 2.500 pesetas. Hoy el club tiene 500 socios y es un ejemplo de compañerismo y difusión del noble deporte del tenis.