La clínica veterinaria Provega, en la calle Doctor Marañón, sufrió el jueves por la mañana un hurto singular: el presunto delincuente se llevó el sello del establecimiento. Y lo que hizo con él fue sellar un talonario de participaciones de lotería con el número 65.397 para el sorteo del 22 de diciembre. Así lo cuenta María del Mar Romero, dependienta de la clínica veterinaria: "entró un chico en la tienda sobre las 11 de la mañana y pidió unas vitaminas para el perro. Me giré para coger las pastillas y cuando se las mostré me dijo que no le interesaban y se marchó. Al cabo de hora y media, se presentó aquí una pareja de la policía preguntándome si estábamos vendiendo lotería. Es entonces cuando eché de menos el sello".
La policía enseñó la foto del presunto culpable a la dependienta, que no dudó un instante en identificarlo. El sello apareció en un portal de la calle Antonio Silva y el portero de la finca lo acercó a la clínica.
Claudio Ambrosio, veterinario de la clínica señala que "no había visto nunca este engaño. No sé cómo venderá esas participaciones. A lo mejor por menos dinero de lo que pone en ella. Pero creo que hay que alertar a la gente de que compruebe todos los extremos cuando alguien desconocido le vende lotería".
Respecto a qué puede pasar si el número resultara premiado, Ambrosio declara: "no tenemos ni idea; por eso hemos formalizado la denuncia. No sé si la policía le dará la publicidad necesaria, pero nosotros no podemos hacer más que denunciarlo".
