El concejal de Obras, Joaquín Rumbo de la Montaña, garantizó ayer a las Josefinas que el acerado de la calle Padre Eladio Mozas, en la fachada posterior del centro, tendrá un vallado especial para evitar cualquier situación de peligro a los alumnos. Responsables de este colegio han denunciado que en la urbanización en esta vía, paralela al centro deportivo del Perú, no se había respetado el proyecto aprobado y que el acerado, en lugar de tener un plano único, presenta un desnivel al haber sido dividido en dos tramos.

Sin embargo, Rumbo aseguró ayer tras reunirse con ellos que se ha adoptado esta solución para que Eladio Mozas pueda tener salida al tráfico para vehículos y los peatones a la calle Argentina. El edil precisó que se instalará también una barandilla de 1,5 metros de alto y con un cerramiento especial para evitar que los niños puedan saltar de un tramo a otro de acera. "Va a quedar mucho más seguro que el cerramiento del colegio", subrayó.

También anunció que ha encargado un informe técnico para valorar si la petición de las Josefinas es viable --que la acera tenga un solo tramo--, aunque dijo que por debajo discurren servicios y un cable de media tensión.