La asociación Novaforma, dedicada a la atención de personas con discapacidad física y psíquica, posee dos locales en la plaza Mayor que estuvieron dedicados a la tienda del centro especial de empleo de este colectivo y al alquiler de una zapatería. El primero lleva más de siete años cerrado y el segundo, cerca de dos. Juan Bachiller, representante de Novaforma, aplaude la iniciativa del proyecto Intramuros de reabrir inmuebles sin uso y se muestra partidario de que inversores privados puedan hacerse cargo de los dos en propiedad de la asociación. "Si hay un inversor, estaríamos dispuestos a alquilar o vender ", asegura Bachiller, que matiza que cualquier acuerdo debe ser adoptado previamente por la asamblea y la junta directiva. "Nosotros no podemos llevar directamente un negocio por las características de la asociación", subraya.

Aunque Novaforma aún no tiene ninguna idea de a qué fin comercial podrían destinarse los edificios ---ambos suman más de 3.000 metros con todas sus plantas--, Bachiller no ve con malos ojos la idea de abrir "una posada con encanto", tal y como les plantearon en la reunión de Vela con los propietarios.