El fantasma de una alumna del Al-Qázeres ha vuelto al instituto. Su muerte fue todo un misterio y ha regresado para vengarse de su asesino. Con su vestido blanco empapado de sangre y sus destacadas ojeras, persigue a los alumnos del instituto para lograr que descubran quién la mató. Nadie lo sospecha, pero lo hizo el director del centro al descubrir que su alumna había averiguado que él se dedicaba a desviar fondos públicos. Es el argumento de 'La niña errante del Al-Qázeres', la terrorífica obra que han escenificado los alumnos del Bachillerato de Artes Escénicas y del ciclo formativo de Actividades Físicodeportivas.
Un ambiente terrorífico con luces tenues, sangre, un cementerio, una ouija, zombis, demonios, vampiros o personajes de largometrajes de miedo como 'Scream', 'Viernes 13', 'La matanza de Texas' y 'Freddy Krueger' se instaló en dos de las tres plantas del edificio del instituto. Acompañado de canciones de Alaska como 'Mi novio es un zombi'. No faltaba nada. El pasaje del terror fue el acompañamiento a la representación escénica. Y es que no se trató de una representación al uso, sino que pedía la participación de los espectadores (padres y alumnos). Para ellos, a la vez que se representaba la obra, se preparó una especie de gymkana, con pruebas por todos los pasillos de miedo hasta descubrir quién mató a la alumna errante.
Seis meses de trabajo
Organizado y dirigido por el profesor Rafael Morales y su alumno Antonio Durán, el pasaje del terror fue una de las múltiples actividades que llevó a cabo el centro con motivo de la semana cultural. Participaron 45 alumnos y cinco docentes del instituto, que han estado más de seis meses ensayando. "Hemos buscado una historia que se acercara mucho a un instituto. Es la primera vez que hacemos algo parecido. Han sido seis meses de trabajo y ha sido complicado. La historia se monta rápido, lo difícil es el montaje y repartir los papeles", explicó el profesor, Rafael Morales.
En la noche del terror se realizaron también otras actividades de miedo como cuentacuentos de terror, una queimada nocturna o un cantajuegos para mayores. Y fuera del instituto, para recibir a los participantes, se preparó una cena sangrienta con serpientes, cerebros y vísceras.
El atrezzo
La vestimenta ha sido seleccionada por los propios alumnos y el maquillaje se llevó a cabo siguiendo las pautas de un tutorial de maquillaje de terror. "El director, por ejemplo iba con el pelo cardado, con sangre y una verruga. El resto de los alumnos han escogido ellos mismos su disfraz", explicó el profesor, Rafael Morales. El pasaje del terror recibió la visita de unas 200 personas entre padres, alumnos y profesores de diferentes centros de la ciudad.
Tras esta experiencia, los alumnos del instituto organizará en junio un juego de rol nocturno por la ciudad monumental. "Con los chicos de animación deportiva solemos hacer recreaciones para los centros escolares. Este año haremos un juego de rol nocturno". Un reto fácil para estos futuros animadores y actores.
