Periodista

Los datos aportados por este medio revelan la alta densidad de vehículos en el centro cacereño, una situación absolutamente desproporcionada que no se debería ajustar a una ciudad con poco más de 80.000 habitantes. Que el número de automóviles que circulan en los accesos al centro sea comparable con las cifras que se dan en Madrid resulta, cuanto menos, sorprendente. Aquí sólo existe una reflexión y ésta no es otra que la que repiten una y otra vez el saber popular: "Cáceres se ha quedado pequeña para tantos coches". ¿Las causas?: un excesivo uso del vehículo particular, la falta de una ronda que dé realmente fluidez a la circulación interna y, por último, la concentración de empresas y organismos públicos a sólo unos pocos metros de distancia. El tráfico es la ´cruz´ de Cáceres, una ciudad que nunca tendrá los recursos que posee una capital como Madrid. La solución no tiene que venir siempre de la Administración y ya es hora que cada uno ponga su grano de arena.

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